Corea del Norte continúa reconociendo su culpa. De hecho, el reino ermitaño desde el comienzo del año ha iniciado un proceso de pacificación en su país y acaba de dar un paso más. Mientras que los contactos son cada vez más frecuentes entre Corea del Norte y Corea del Sur, ahora las familias separadas por la guerra tienen derecho a reunirse de nuevo. Este lunes, docenas de familias se encontraron cara a cara por primera vez en muchos años. Sin embargo, el Gobierno de Corea del Norte insistió en que estas reuniones fueran breves, ya que solo durante las once horas las familias podían comunicarse entre sí.

Nueva flexibilización entre Corea del Norte y Corea del Sur

Esta nueva reunión, la primera en tres años, es una nueva señal de relajación iniciada por Corea del Norte desde principios de 2018. Estas diferentes reuniones tuvieron lugar en un complejo en el Monte Kumgang, en la parte norte de la península. Es importante señalar que la mayoría de los miembros convocados son ancianos, y no han visto a sus hijos, hija o sobrina durante varias décadas. Por lo tanto, esta reunión fue la oportunidad única para que estas familias separadas vean por última vez a las personas que han sido separadas desde el final de la guerra, en 1953.

Aunque la comunicación generalmente está prohibida entre las poblaciones de ambos países, dichas reuniones podrían multiplicarse en el futuro.

De hecho, durante dieciocho años, se han organizado no menos de veinte series de reuniones para familias separadas por la guerra.

Estas organizaciones de reuniones son gracias a la mejora de las relaciones bilaterales entre ambos países, y dado el calentamiento actual del país, muchas personas más podrían verse atraídas a participar en una de estas reuniones conmovedoras.

Un mensaje de despedida durante estas reuniones

Este tipo de acercamiento es muy emotivo para los participantes, que ven a su familia por última vez. Este es particularmente el caso de Baik Sung-kyun, que tiene 101 años. Este último compró a su nuera y a su nieta "ropa, ropa interior, 30 pares de zapatos, cepillos de dientes y pasta de dientes", explicando que, dada su edad, será la última vez que él podrá verlos.

Algunos también prefirieron abandonar su lugar cuando supieron que la persona a la que querían ver estaba muerta, y que solo podían contactar a miembros que estaban lejos de sus familias. Evidentemente, no se ha firmado ningún tratado de paz entre Corea del Sur y Corea del Norte desde 1953, lo que impide cualquier comunicación civil entre los dos países.