La Corte Suprema de Justicia de Estados Unidos falló hoy a favor de un veto para ingresar a Estados Unidos contra ciudadanos de siete países, iniciativa de Donald Trump que había rechazada a nivel nacional e internacional.

Esta iniciativa, la tercera después del fracaso de las dos anteriores y firmada por el presidente Donald Trump, consiste restricciones a ciudadanos de Irán, Libia, Siria, Somalia, Yemen, Venezuela, la República Popular Democrática de Corea (RPDC) y Chad. En el caso de la RPDC y Venezuela, las regulaciones afectan a los altos funcionarios y sus familias más cercanas

Donald Trump gana en una corte dividida

Donald Trump ganó la batalla política de gran importancia este martes con la bendición de la Corte Suprema de Justicia sobre su controvertido veto en varios países de mayoría musulmana.

El Tribunal Supremo ha fallado a favor de Donald Trump con cinco votos a favor y cuatro en contra.

La sentencia, redactada por el juez John Roberts, fue apoyada por la mayoría conservadora de la corte y en ella se aclara que Donald Trump ha ejercido "legalmente" su poder de suspender la entrada de ciertos ciudadanos al país. La prohibición significa que los Estados Unidos rechazará categóricamente las visas de entrada a turistas de los países mencionados.

El fiscal general de Estados Unidos, Jeff Sessions, elogió el fallo como "una victoria sustancial para la seguridad del pueblo estadounidense"

Algunos rechazaron la decisión de la Corte Suprema de Justicia

Se esperaba que la disposición final de la prohibición tardará meses en resolverse, pero el fallo del Tribunal Supremo fue un golpe para los defensores de la lucha contra la discriminación, quienes prometieron protestar contra la decisión.

Los grupos opositores al desafío legal a la prohibición de viajar, expresaron consternación ante la decisión de la Corte Suprema, particularmente a la luz del voto de Trump como candidato para prohibir el ingreso de todos los musulmanes a los Estados Unidos y el registro de comentarios despectivos sobre el Islam y sus seguidores.

Mientras, el presidente se jactó de una "tremenda victoria para el pueblo estadounidense" poco después de que se dictara la decisión del tribunal supremo. No quedó inmediatamente claro si la decisión cambiaría la forma en que se implementará la política en el futuro.

Trump había promovido otras prohibiciones de viaje

La lucha por el veto migratorio se inició a los pocos días después de la llegada del Donald Trump a la Casa blanca como presidente en el año 2017.

La nueva administración desató una ola de críticas con la aprobación de un veto de 120 días a ciudadanos de países de mayoría musulmana, entre ellos: Irán, Irak, Somalia, Libia, Sudán, Siria y Yemen. La intención era de proteger a los ciudadanos estadounidenses de las personas que Trump considera una amenaza nacional. A los pocos meses se aprobó una nueva orden de 90 días de veto para excluir a países como Irak y Siria.

Como consecuencia de esa orden, 700 turistas fueron detenidos en aeropuertos y 60. 000 visas fueron revocadas, según datos del Departamento de Estado, esto generó un caos generalizado en estas instalaciones en todo el país.

El presidente de EE.UU. ha criticado fuertemente leyes migratorias de su propio país catalogándolas de "débil y desde que llegó al poder se ha esforzados en implantar nuevas leyes que impidan el paso de ciudadanos de otros países a Estados Unidos, en especial aquellos que consideran ladrones y terroristas.

"Por muy ridículo que suene, las leyes de nuestro país no nos permiten mandar fácilmente de vuelta a aquellos que cruzan nuestra frontera sur", dijo Trump en uno de sus mensajes publicado en Twitter.