Se dice que el líder norcoreano Kim Jong Un está ansioso por su cumbre con el presidente Donald Trump en Singapur el próximo mes. Citando fuentes familiarizadas con los preparativos, The Washington Post informó que Kim estaba menos preocupado por conocer a Trump que por lo que podría pasar en su casa en Pyongyang mientras él no está.

¿Qué le está ocurriendo a Kim Jong-un?

Al parecer, Kim está preocupado de que el viaje a Singapur pueda dejar a su gobierno vulnerable a un golpe militar o que otros actores hostiles intenten deponerlo, según dijeron algunas fuentes.

La dinastía Kim ha gobernado Corea del Norte desde el inicio del país después del armisticio en 1953.

Los rumores de una revuelta militar a fuego lento en Corea del Norte son precisamente el tipo de cosa que envalentonó a Kim para mantener un estricto control del poder a lo largo de los años, según algunos expertos.

Los dictadores siempre se sienten inseguros de su poder de control

La noción de que Kim Jong-un está seguro en su poder es fundamentalmente errónea. Los dictadores pueden ejercer un poder extremo sobre el pueblo, como Kim Jong-un, pero también todos los días se sienten patológicamente inseguros sobre su control sobre el trono. Toda la especulación pública sobre los golpes de Estado o los líderes interinos alimenta el impulso paranoico de un dictador.

Ahora Kim está demostrando su inseguridad.

El presidente Donald Trump también expresó cierta inquietud por la próxima cumbre después de que Corea del Norte cambió su tono en los últimos días. Corea del Norte comenzó a elevar su voz de nuevo después de Estados Unidos y las fuerzas de Corea del Sur realizó ejercicios militares conjuntos de rutina

Donald Trump intervino el martes, refiriéndose a la cumbre planeada con Kim: "Hay muchas posibilidades de que no funcione".

"Eso no significa que no funcionará durante un período de tiempo, pero puede no funcionar para el 12 de junio", dijo.

La posición del presidente de Corea de Sur

A pesar de las aparentes dudas en ambos lados, el presidente surcoreano Moon Jae-in se mantuvo optimista durante una conferencia de prensa en la Casa Blanca.

"Gracias a su visión de lograr la paz a través de la fortaleza, así como su fuerte liderazgo, esperamos la primera cumbre entre EE.

UU. Y Corea del Norte", dijo Moon en una declaración de apertura a Trump.

"Y nos encontramos un paso más cerca del sueño de lograr la desnuclearización completa en la península de Corea y la paz mundial".