Soldados del Ejército de Zimbabue han tomado el control de los principales edificios gubernamentales de la capital en un levantamiento que evitan describir como "golpe de estado" y definen como una "acción para detener a los criminales del entorno del presidente Robert Mugabe que provocan el sufrimiento social y económico del país". Hay al menos tres ministros detenidos.
Mugabe se encuentra actualmente bajo arresto domiciliario y el Parlamento, el Tribunal Supremo y el Munhumutapa, que acoge la oficina del presidente, son algunos de los edificios bloqueados por los militares.
"Tan sólo actuamos contra criminales"
En un comunicado oficial emitido en directo desde la televisión estatal ZBC, ahora bajo el control del Ejército, el portavoz Maj Gen Sibusiso Moyo no habló de golpe de Estado, sino de una acción para detener a aquellos cercanos al partido que han sumido al país en una grave crisis económica. La corrupción en Zimbabue provoca que el país pierda 1.000 millones de dólares al año, según Europa Press.
"Tan sólo actuamos contra criminales. Una vez hayamos completado nuestra misión, esperamos que la situación vuelva a la normalidad" agregó el portavoz mientras instaba a los ciudadanos a quedarse en sus casas y garantizaba seguridad, aunque algunas fuentes hablan de disparos y explosiones en la zona norte de la ciudad, cerca de la residencia privada de Mugabe.
Mugabe y su familia, a salvo según el Ejército
La preocupación por el presidente y su familia de los cercanos al partido de Mugabe y sus votantes ha sido más que evidente durante las últimas horas. No obstante, el presidente de Sudáfrica, Jacob Zuma, ha asegurado que ha hablado con él y que "tanto Mugabe como como su familia se encuentran sanos y salvos".
Por ahora, no hay respuesta oficial del Gobierno y los cuerpos de seguridad cercanos al presidente aún no han intervenido. Si lo hicieran, los hechos podrían tornarse en un enfrentamiento sangriento. Algunos medios de comunicación informan de que el presidente podría estar preparando su dimisión y negociando la salida del país de su esposa.
La purga de veteranos
La tensión ya era notable previamente. Según ABC News, desde el pasado miércoles pudieron observarse tanques militares recorriendo las principales calles de la ciudad. En el contexto de fondo de esta crisis del gobierno zimbabuense destaca el debate sucesorio que enfrenta a los partidarios del vicepresidente Emmerson Mnangwa y la esposa del presidente de 93 años, Grace Mugabe.
La semana pasada Mnangwa fue destituido del partido, algo que llevó a parte de la población y del Ejército a denunciar una "purga de veteranos" para allanar el camino de ascenso al poder de Grace Mugabe. Precisamente ayer, el jefe de las fuerzas armadas, Constantine Chiwenga, amenazó con tomar “medidas correctivas” si continuaba la purga de veteranos en el partido y no se calmaban las tensiones políticas sobre el posible sucesor de Mugabe, en el poder desde 1980. Una respuesta que el partido gobernante calificó de "traidora".