Se trata de un pequeño barco velero, donde mujeres con menos de 9 meses de embarazo, pueden realizarse abortos sin ningún tipo de reglas ni limitaciones, y lo más relevante aún, de una manera totalmente segura y legal. Dichas intervenciones son realizadas sin ningún procedimiento quirúrgico y en manos de médicos especialistas.

Este movimiento que está dando mucho de qué hablar, es llamado “mujeres sobre las olas”, que viajan a bordo de un velero de bandera holandesa en aguas internacionales realizando abortos a mujeres de cualquier parte del mundo interesadas en dicho procedimiento.

El personal especialista altamente capacitado, administra a las pacientes pastillas orales aceptada por la ONU.

Mujeres sobre las olas surca los mares de muchos países, donde el aborto está restringido o simplemente prohibido a menos que haya una amenaza a la integridad física de la mujer, tal es el caso de Venezuela e Irlanda.

En la asamblea general número 69 de la ONU, el comité solicitó a Venezuela que reconsiderara la posibilidad de modificar las leyes referentes al aborto, para que de alguna forma se pudiesen realizar interrupciones de embarazos, pero incluso con la exhortación de la ONU, en dicho país el aborto es ilegal.

La condena a una mujer que se realiza un aborto es de 6 meses a 2 años de prisión, y de 1 a 3 años al médico o persona que realiza la intervención, extendiéndose la sentencia si durante del procedimiento la mujer pierde la vida.

Si dicha organización se acercara a los límites de las costas venezolanas, sin traspasar el espacio marítimo de dicho país, ésta tiene derecho total de realizar abortos sin que ninguna autoridad venezolana pueda intervenir, ya que esta embarcación estaría situada en aguas internacionales donde el aborto es totalmente legal, al igual que en la mayoría de los países de Europa.

Modo de operación:

Esta embarcación primero atraca en cualquier puerto del país en cuestión después de realizar los trámites y permisos correspondientes, luego abordan a las mujeres para así trasladarlas a aguas internacionales donde están absueltas de las leyes de su país, y le administran una toma oral de Misopostrol y Mifepristona, en conjunto dichos medicamentos provocan el aborto.

El primer viaje fue realizado en el 2001 por varios médicos holandeses y una enfermera en las aguas internacionales cerca de Irlanda, donde atendieron a una gran cantidad de mujeres con menos de 9 meses embarazo. Esta campaña seguirá cumpliendo con su misión, pese a los inconvenientes que han sufrido en muchas naciones.