Este sábado por la mañana, el aeropuerto de Orly al sur de París, el segundo en importancia del país después del Charles de Gaulle, fue escenario de un incidente de corte terrorista, que provocó la evacuación y el cierre de sus instalaciones.

Durante las primeras horas del sábado, más exactamente a las 7,30 hora local, un hombre, atacó en una de las salas de acceso de las líneas aéreas a una agente que patrullaba la terminal, como integrante de la Operación Centinela que se desarrolla en Francia desde los atentados terroristas islámicos del 2015.

El atacante trató de arrebatarle su arma reglamentaria, aunque aún son confusas las informaciones que definen si logró su cometido. Durante el forcejeo consiguió derribarla, corriendo inmediatamente a refugiarse en el McDonald's del aeropuerto. Numerosos agentes destacados en la terminal aérea, acudieron al lugar, entablándose un tiroteo, al que el atacante no respondió, resultando finalmente abatido. El portavoz del Ministerio del Interior, Pierre-Henry Brandet, aclaró a la prensa que no hubo víctimas entre los civiles, ni en las fuerzas del orden que controlaron el incidente.

Según informa Le Monde en su última edición, el delincuente abatido era conocido por la policía de la ciudad, y estaba fichado por robo y tráfico de drogas aunque, no se lo relacionaba con potenciales actos terroristas.

El individuo de 39 años de edad tenía nacionalidad francesa. Identificado finalmente como Ziyed Ben Belgacem, un islamista que fue reconocido también como el agresor en un hecho ocurrido alrededor de las 06.50 horas, al norte de la ciudad, en Garge les Gonesse, una hora y media antes del ataque de Orly. Allí disparó contra un policía, el que felizmente se encuentra asistido y fuera de peligro.

Su raid delictivo continuó con el robo de un automóvil y, amenazas a los concurrentes en un local de bebidas de Vitry. Desde ese lugar, ya muy cercano al aeropuerto, se supone que se dirigió a su destino final.

Familiares cercanos al delincuente, que recibieron un mensaje de Ziyed Ben Belgacem, en el que confesaba haber cometido una estupidez, han sido arrestados en el marco de la investigación. El ministro del Interior francés, Bruno Le Roux, según informa "Público", ha catalogado el episodio, como un atentado.