Diversidad de reacciones ha provocado el vídeo del condenable acto que fue inescrupulosamente compartido vía Whatsapp. La secuencia inicial del clip muestra como un grupo de cinco jóvenes -incluyendo la víctima- se encuentran a orillas de un río ubicado en la provincia argentina de Salta. Por sus movimientos se presume que estaban ebrios. Uno de los jóvenes es sostenido por otros dos integrantes, inmovilizándolo por los brazos, siendo así sodomizado sobre la superficie de una roca, mientras otro integrante, el ejecutor, lo penetra sin remordimiento alguno y, por si fuera poco, el último integrante graba el hecho desde su teléfono móvil.
Si bien es cierto que el avance tecnológico supone una manera de comunicación más rápida e información prácticamente instantánea a través de la Internet, este medio también es una ventana abierta y difícilmente controlable donde se puede filtrar prácticamente cualquier información sin consecuencias inmediatas. Tal es así en este caso, donde un delito penado por la ley y un claro atentado contra los derechos humanos, fue ‘compartido’ sin filtro alguno en la web.
Las autoridades argentinas, se encuentran en averiguaciones para identificar a los agresores y localizar a la víctima. No obstante, aún no se conoce la identidad de ninguno de los jóvenes.
En cualquier caso, el trauma no solo psicológico que marcará a este joven, se verá potenciado ante la cruda realidad de hacerse famoso al correr en la Internet la grabación de su desafortunada experiencia.
Es un trabajo de consciencia colectiva. Hay que inculcar a los internautas que no colaboren en la difusión de esta clase de vídeos, donde se destruye la integridad y moralidad de las personas. No es la primera vez que esta clase de delitos son difundidos por las Redes Sociales. Hay una tendencia casi popular de compartir estas cosas.
De nosotros depende seguir siendo cómplices silentes de estos abusos, o repudiarlos a modo de protesta para que organismos internacionales establezcan normas restrictivas sobre el material que es difundido diariamente en la red.