Seguramente muchos de vosotros penséis en la refrescante cerveza cuando se habla de cebada, pero este cereal puede emplearse en la elaboración de excelentes recetas en la cocina. Hoy os dejo una para que disfrutéis de todas sus propiedades.
La cebada tiene muchos beneficios para la salud entre las cuales destaco su acción en el tracto digestivo facilitando así la digestión de los alimentos cuando hay digestiones lentas o para diarreas. Otras propiedades pueden ser su poder diurético, depurativo, remineralizante y reconstituyente y activa el hígado.
Además puede ayudar a calmar los nervios.
Incluso los más pequeños de la casa, los bebés, pueden beneficiarse de la cebada cuando padecen problemas de eccema ya que ésta, en forma de papilla con avena les calma los brotes que puedan tener. De hecho,también va bien para la piel en general y para el acné en particular. Para casos de contracturas musculares puede emplearse en forma de cataplasmas.
También es recomendable su consumo para los que sufren arteriosclerosis o diabetes. Eso sí, las personas con hipertensión deben vigilar su consumo al igual que los celíacos.
La receta de hoy es una muy buena opción para los vegetarianos y para todos aquellos que les guste disfrutar de los cereales integrales.
- 200gr de cebada.
- 250gr de garbanzos cocidos.
- 1 calabacín.
- 1 cebolla.
- 3 zanahorias.
- 150g de judías verdes.
Mezclar todos los ingredientes en un plato: cebada, garbanzos y verduras.
¡Listo para comer!