El estilo de vida minimalista se ha convertido en una tendencia social a través de su principio de vivir con lo esencial. Un camino que invita a ser feliz sin mucho.
El ser humano moderno tiende a asociar la felicidad con respecto al número de posesiones materiales y algunas de las razones son el tiempo y la posición social, ya que el avance de la tecnología ha hecho de la rapidez un estilo de vida y, a su vez, categoriza a la humanidad. Sin embargo, ¿qué pasa cuando el estilo de vida de una persona se congestiona por productividad innecesaria y por consiguiente ocasiona estrés y dependencia material que conlleva a la destrucción físico-mental?
Ser minimalista es un reto
Para muchos, un estilo de vida minimalista conlleva cambios trascendentales, ya que esta tendencia te invita a vivir con lo necesario para alcanzar la felicidad y el bienestar integral. Para ello, es necesario llevar a cabo una organización de tus posesiones y hábitos de vida. Vivir con lo esencial no significa necesariamente renunciar a todas tus actividades y donar cada objeto de tu hogar, sino más bien marcar una jerarquía de qué es verdaderamente necesario y no desperdiciar tu tiempo y energía en actividades no productivas y que se alejan de tus verdaderas pasiones; es mejor ser feliz con poco que infeliz y con una enorme lista de objetos y hábitos innecesarios.
Prácticamente el minimalismo te invita a alcanzar la libertad por medio la eliminación de excesos en objetos, pensamientos, hábitos y acciones.
Consejos para tener una vida sencilla y objetiva
Todo el mundo quiere ser feliz, pero precisamente para alcanzarlo debemos deshacernos de nuestras dependencias superficiales que nos desvían de nuestra verdadera libertad.
La etapa de reflexión existencial de los humanos se caracteriza por las siguientes preguntas: ¿En qué me he convertido?, ¿estoy satisfecho con lo que he construido?, ¿mi vida es objetiva? Para responderlas es necesario la práctica, así que unos de los consejos necesarios para un détox y vivir saludablemente son los siguientes:
- Dona, vende o regala todos aquellos objetos que tienes guardados en tu casa por muchos años y no son para nada necesarios.
- Establece nuevos valores personales. Pregúntate qué valores están guiando tu vida.
- Define tus metas futuras. Si no estás seguro de lo que quieres, tómate un tiempo para reflexionar qué te apasiona y cómo llevarlo a cabo.
- Descarta todas las relaciones interpersonales tóxicas. Tú sabes quiénes son.
- Haz esto hasta convertirlo en un estilo de vida saludable.
Es importante llevar una manera de vivir acorde a tus pasiones y metas de vida, de otra forma estarás despilfarrando tu productividad y será difícil alcanzar un nivel de libertad propicio.
En medio de esta sociedad consumista es vital mantener un equilibrio entre lo que tienes y lo que de verdad necesitas para ser consciente al tomar la dirección de tu realización personal. La felicidad al alcance de todos es un hecho, sólo debemos tomar importantes decisiones.