En la búsqueda de un nuevo entrenador, hay un nombre por encima de otros en la lista de Joan Laporta, y no es otro que el de Hansi Flick, del Bayern de Múnich. Al presidente culé sigue sin convencerle Ronald Koeman para dirigir al Barcelona la próxima temporada. La mala temporada de los culés ha servido de aliciente para que desde la directiva del club se tome la decisión de buscar un nuevo técnico de cara al siguiente curso.

Además, el nombre del alemán se sobrepone al de otros como Xavi Hernández, teniendo en cuenta la compleja y arriesgada apuesta que supondría la llegada del otrora centrocampista.

El actual técnico del Bayern de Múnich, quien ya anunció hace algunos meses que no continuaría dirigiendo al actual campeón de la Bundesliga, es el favorito de Laporta para redirigir el rumbo del equipo azulgrana. Tanto es así que el técnico alemán tuvo una charla con el presidente y no vería con malos ojos iniciar una nueva aventura en LaLiga española. Para ello, Flick debería antes rechazar la oferta para dirigir a la selección alemana tras la Eurocopa, como sustituto de Joachim Löw.

Eso sí, no solo el Barcelona anda tras sus pasos. La Juventus de Turín es otro de los equipos que recientemente ha mostrado interés por Flick, aunque sin llegar a entablar conversaciones firmes con el entrenador.

Por su parte, al máximo mandatario barcelonista le agrada la filosofía y la identidad de juego que definen al entrenador número uno de su lista. El pasado martes, con sus declaraciones durante la celebración de la Fiesta del Deporte Catalán, Laporta ya dejó claro que era el momento de hablar de fin de ciclo y de renovar la plantilla. "Lo que ahora tenemos que hacer es trabajar duro y con eficacia para tener un equipo muy competitivo el próximo año y que podamos aspirar a ganar la Champions, como dije en campaña electoral", fueron las palabras del presidente durante el acto.

Un compromiso verbal

El combinado nacional alemán es, de hecho, la gran barrera que separa a Flick del Barcelona. La federación de Fútbol germana lo tenía ya todo apalabrado con el actual técnico del Bayern. Eso sí, sin documentos firmados de por medio, por lo que ninguna relación contractual une aún a Flick con la selección de su país.

No obstante, sí tendría el técnico que rechazar formalmente la oferta emitida desde la federación, rompiendo el compromiso verbal al que ambas partes llegaron hace escasas semanas. La llamada de Laporta ha sembrado la duda en un entrenador que, de finalmente llegar al Camp Nou, viviría su segunda experiencia lejos de Alemania. Cabe recordar que en el año 2006, Flick llegó a formar parte del cuerpo técnico del Red Bull Salzburgo austriaco.

Flick, una apuesta ganadora

La apuesta de Laporta por Flick no obedece a otra cosa que no sea volver a hacer del Barça un equipo campeón y temido en Europa. De hecho, eso fue lo que hizo el alemán desde que asumió el cargo de primer entrenador del Bayern de Múnich en noviembre de 2019, sustituyendo a Niko Kovac, del que antes era su segundo.

En casi dos temporadas dirigiendo al conjunto bávaro, Flick ha aumentado sustanciosamente su palmarés. En la campaña 2019/20 se hizo con la Copa de Alemania, la Champions League y la Bundesliga; mientras que en la actual ya ha revalidado el título de campeón liguero, además de alzarse con la Supercopa de Europa, la Supercopa de Alemania y el Mundial de Clubes.

Precisamente, Flick ya se enfrentó al Barcelona en la Champions, en unos cuartos de final para el olvido por parte de los culés, a quienes el Bayern les acabó endosando un contundente 8-2.

La alternativa de Laporta

Metido de lleno en perfilar los componentes técnicos y deportivos de la temporada que viene, el asunto del entrenador es uno de los primeros que Joan Laporta quiere dejar zanjado en su primer verano desde que recuperara la presidencia del club. La opción de Flick surge como alternativa a Koeman -con un año de contrato más por delante- y al propio Xavi. Si bien, como decíamos, se trata de una apuesta arriesgada, también es una de las más deseadas por parte de la afición. Sin embargo, entre las prioridades del máximo mandatario culé, estaría mejor posicionado el alemán que el ex centrocampista.

Esto se debe a que, además de que Xavi ha renovado recientemente con el Al-Sadd de Catar, el de Terrassa fue una de las principales bazas Víctor Font, uno de los competidores de Laporta en la pugna por la presidencia. Asimismo, teniendo en cuenta la renovación de plantilla que se quiere llevar a cabo, el actual presidente no contempla la llegada de Xavi ya que su amistad con varios componente de la plantilla podría interferir en el plan que tiene en mente. Por su parte, Flick llegaría como alguien totalmente nuevo al Camp Nou, sin vínculo alguno con los jugadores (a excepción de Coutinho, con quien coincidió el pasado curso en el Bayern).