La tenista de nacionalidad rumana, Simona Halep, ha logrado superar a una de las mejores tenistas de la historia, la estadounidense Serena Williams, por un doble 6-2. De esta manera, por primera vez en su vida, la tenista rumana logra el título del prestigioso torneo de Wimbledon, que es el tercer Grand Slam dentro de la agenda de la temporada.

La jugadora rumana, que actualmente es la número cuatro del mundo, ha logrado su segundo torneo dentro de la lista de Grand Slam, después de conseguir el Roland Garros en el año 2018, lo que hizo que las casas comerciales se fijaran en ella.

Simona Halep ganó en menos de una hora

Halep solo necesitó 55 minutos (menos de una hora) para acabar con las posibilidades de Serena Williams, una de las mejores tenistas de toda la historia del tenis. Por el momento, de los once enfrentamientos entre ambas tenistas, dos han sido victorias para Simona Halep y nueve para Serena Williams.

El objetivo de Serena era conseguir su octava victoria en Wimbledon, en su carrera profesional, lograr su 24 Grand Slam y alcanzar, de esta manera, a la tenista australiana Margaret Court, una verdadera leyenda en el deporte, como máxima ganadora de los conocidos como “Majors” en la categoría individual femenino.

Halep es la primera tenista rumana en ganar Wimbledon

Lo sorprendente es que, antes del partido, tanto los espectadores como los medios de comunicación estaban más centrados en el récord que podría conseguir Serena Williams, que por las opciones que podría tener Simona Halep, que podría convertirse en la primera tenista de nacionalidad rumana en ganar Wimbledon (y lo logró).

Simona Halep, con su victoria, ha logrado vengar a su compatriota, Ilie Nastae, que perdió las finales de Wimbledon de los años 1972 y 1976.

Halep logró ganar el certamen a la primera, con 27 años de edad. El 9 de octubre de 2017 consiguió ser número uno del mundo después de once años de carrera profesional. Es considerada la mejor tenista rumana de la historia.

La mayor parte de las victorias de Simona Halep han sido en tierra batida o en pista dura. Uno de los datos más curiosos de la tenista es que, a los 18 años de edad, tomó una decisión drástica: reducirse el pecho con una cirugía plástica, lo que le facilitó llegar al número uno de su deporte. Según explicó en varias entrevistas, tener un pecho grande le condicionaba mucho a la hora de jugar, por no hablar de los fuertes dolores de espalda que padecía por el peso y el volumen del mismo. En el año 2010, en la pista de Roland Garros, reapareció con un aspecto muy diferente y muchas ganas de llegar a lo más alto. Y lo ha conseguido.