El Voleibol es un deporte que requiere de una excelente condición física, además de una estrategia para vencer al enemigo. Seguramente alguna vez lo has jugado pero aun así, las reglas cambian un poco cuando se trata de competir a nivel profesional. Se necesitan 6 jugadores: tres se colocan en fila frente a la red o malla y tres, al fondo de la cancha. Algunas escuelas ocupan 9 jugadores, pero realmente lo ideal son 6.

Por otro lado, en el voleibol de playa solo son 2 jugadores por equipo, y aunque la cancha es más pequeña, imagínate el esfuerzo que hacen para que sus pies no les pesen tanto por la arena y el sol.

Y seguro te has preguntado cual es el lugar ideal para practicar; casi en todas partes. Hay canchas en exteriores y en interiores. Una cancha mide aproximadamente 18.30 m de largo por 9.15 m de ancho. Puedes practicarlo en cualquier lugar, abierto o cerrado, como en un parque o un gimnasio, lo importante es que empieces a dominar bien la pelota. La cancha se divide en dos partes y la red se coloca justo en el medio.

Por su parte, el primer equipo que llegue a 15 puntos, gana el juego, pero eso sí, debe haber una diferencia de dos puntos para poder ganar, por ejemplo: si el marcador va 14-15, el juego continúa hasta que un equipo consiga los dos puntos de ventaja. Acuérdate que cuando se rompe o pierde el servicio, no cuenta con punto, simplemente sirve el equipo contrario.

Por lo general, son 3 sets de 15 puntos cada uno, y el equipo ganara el partido cuando gane de 2 de esos 3 sets. También pueden jugarse 5 sets, y en ese caso el equipo ganador será aquel que gane 3 sets de 5.

Un calentamiento adecuado

Puedes calentar con un compañero o contra una pared. Debes hacer estos ejercicios durante 10 o 15 minutos continuos e ir incrementado la fuerza en ellos.

Algunos entrenadores empiezan el calentamiento haciendo que los jugadores corran unos minutos alrededor de la cancha.

  • Lanza el balón a tu compañero usando tus dos manos. Al flexionar tus brazos, cuida que el balón pase por detrás de tu cabeza. Tus piernas deben estar flexionadas y en continuo movimiento (saltos cortos y rápidos).
  • Salta lentamente de 8 a 10 veces simulando que bloqueas; pegada a la red, obviamente.
  • Práctica tú bolea, lanzando el balón a corta distancia. Repite la operación por lo menos 20 veces seguidas, el chiste es que no pierdas el balón.
  • Acomoda el balón de tal forma que tu compañero pueda rematar o recibir. Esto también debe practicarse cerca de la red.
  • Después, haz un poco de estiramiento de pies, piernas, torso, brazos, espalda y manos.

Parte de la diversión, consiste en mantener el balón en juego, así que no dudes en practicar.

Beneficios del voleibol

El voleibol hace que tanto tu torso como tus piernas se ejerciten en cada juego. Fíjate bien, cada saque y bolea pone en acción tus hombros, espalda, brazos y manos. Cuando tienes que alcanzar un saque difícil, más vale que tus piernas se muevan a la velocidad de la luz porque si no será punto a favor del contrincante.

Tus piernas deben estar semiflexionadas antes de brincar para poder bloquear o rematar. De esa manera te impulsaras con más fuerza. Esta es la posición básica del voleibol, porque al tener las piernas flexionadas, demuestras estar pendiente y en espera de la acción. Por último, una dieta balanceada es muy recomendable para que tu rendimiento sea perfecto.