Cuando se le preguntó a Zidane si tenía que ganar el torneo para mantener su trabajo, dijo: "Es independiente de eso". La leyenda de Francia, cuyo equipo no ha sido eliminado de Europa una vez durante sus dos años y medio a cargo, dijo: "Hoy soy el entrenador y quiero continuar en este club". "Pero no es importante. Lo que les importa a todos es pensar en este juego y eso es todo".
Ausencias en el equipo alemán
El Bayern no pudo contar con el extremo Arjen Robben para el viaje al Bernabéu después de sufrir una lesión en la pierna a los ocho minutos del partido de ida.
Se contó con el lateral izquierdo David Alaba pero no con el centrocampista Javi Martínez que regresaba de una lesión.
El Real Madrid no tuvo al lateral derecho Dani Carvajal y al centrocampista ofensivo Isco. Zidane era tímido sobre quién jugaría en el lugar de Carvajal, con el centrocampista Nacho y el extremo Lucas Vázquez como los candidatos más probables. Antes del partido agregó que su equipo buscará atacar desde el comienzo, a pesar de que un empate, o incluso una derrota, los llevaría a su fin.
Un Real Madrid de estrategias
"La clave para nosotros es pensar en ganar el juego e ir al terreno de juego queriendo hacer eso", dijo Zidane. "Necesitamos salir a puntuar rápidamente y eso es lo que trataremos de hacer".
El jefe interino del Bayern Jupp Heynckes, que está siendo reemplazado por Niko Kovac al final de la temporada, ganó la Liga de Campeones al final de su temporada anterior a cargo (2012-13) antes de que Pep Guardiola se hiciera cargo.
Él dice que su lado buscará remediar sus errores de la primera etapa. "Necesitamos minimizar nuestros errores y queremos cambiar algunas cosas de la primera etapa", dijo.
"No cambiar nada sería un error. Vi cosas positivas, pero hay cosas por arreglar. Trataré de rectificar errores; intentaremos atacar. Concedimos objetivos por algunos errores, no tenía nada que ver con la organización o el estilo de juego".
El camino para el Real Madrid está despejado para que conquiste su tercera Champions League de manera consecutiva, lo que sería algo inédito en toda la historia del Fútbol europeo.
Obviamente el equipo de Zinedine Zidane persigue con ansias este hazaña, es más que una obseción para los jugadores y para los directivos del club merengue.
Su presidente, Florentino Pérez también está con "La Orejona" entre ceja y ceja, ya que expresaría el dominio del club merengue en el ámbito continental, lo que dejaría atrás el fracaso en la liga local.