El FC Barcelona ha completado una temporada espectacular. A pesar del tremendo lunar de caer ante la Roma en los cuartos de final de la Champions League, lo cierto es que nadie se esperaba allá por el mes de agosto que el conjunto azulgrana pudiera conquistar la liga y la copa. En aquel momento, con Neymar traspasado, sin Fichajes que ilusionaran y ante la paliza sufrida ante el Real Madrid en ambos partidos de la Supercopa de España, nadie podía imaginar un cambio tan importante.
Sin embargo, ahora que ya está el pescado vendido, toca centrarse en la planificación de la próxima temporada.
El objetivo número uno sigue siendo Antoine Griezmann. El fichaje parecía absolutamente cerrado, a falta de confirmación oficial. Pero nada más lejos de la realidad. No solo no se ha confirmado, sino que han aparecido informaciones que sitúan al delantero francés aceptando la oferta del Atlético de Madrid para prolongar su contrato. De producirse, supondría un fracaso (otro más) de una directiva absolutamente pésima.
El FC Barcelona no quiere volver a hacer el ridículo
Esta vez, el presidente del FC Barcelona ha trazado un plan B desde el principio para que no le pille el toro. Va a ir a por todas a por Antoine Griezmann, negociando él mismo si fuera necesario. Tratará de hacerlo de la manera más rápida posible.
La idea es anunciar el fichaje antes del Mundial de Rusia. Sin embargo, el presidente no quiere de ninguna manera experimentar la misma sensación del verano pasado.
El trabajo de Ernesto Valverde ha sido espectacular pero lo cierto es que los milagros no se repiten. La temporada se ha basado en tres pilares fundamentales: un excelso Leo Messi, un decisivo Ter Stegen...
y sobre todo un Real Madrid que arrancó mal y cuando se quiso dar cuenta ya había perdido toda posibilidad en la liga. Para que no se repita, una vez que Coutinho ya empezará la temporada desde el principio, el FC Barcelona tiene preparado un plan B por si finalmente Griezmann no viene.
Los 100 kilos de Griezmann, repartidos para dos fichajes
Y es que, en caso de no poder fichar a Griezmann, el FC Barcelona tiene apalabrados dos fichajes. Por un lado Christian Eriksen, centrocampista del Tottenham. Por otro, Miralem Pjanić, mediocentro de mayor calidad en la Juventus de Turín. El club espera poder cerrar ambos fichajes con los 100 millones reservados para Griezmann, es decir, 50 kilos por barba.
De producirse ambos fichajes, es cierto que la decepción por no fichar a Griezmann sería importante, pero a efectos del equipo, quizás hasta le iría bien. Con ellos, Coutinho podría jugar en la parte izquierda del ataque, dejando a Eriksen y Pjanić alternarse con Ivan Rakitic. El Barça regresaría a su estilo de siempre y plantaría candidatura muy seria a dominar Europa.