El Bayern de Münich pudo cerrar su pase a cuartos de final de la UEFA Champions League ante el Besiktas en Estambul por marcador de tres goles por uno, el cual abultó más el resultado global: 8-1 en lo que fue el partido que dio inicio al cierre del telón de los octavos de final.

Solo un milagro de los turcos podía salvar lo inevitable, pero el partido terminó al igual que las otras goleadas de esta instancia: pasó el que llevaba la ventaja. Lo mismo sucedió con el Liverpool y Manchester City, ambos equipos ingleses solo tuvieron que completar el trámite, sin embargo, el único que perdió su partido fue el conjunto de Pep Guardiola ante el Basel.

Mucho se hablaba de si el Besiktas pudiera hacerle eliminatoria a un Bayern de Jupp Heynckes, el cual –con este- ya ha ganado 11 once partidos seguidos en la máxima competencia de clubes europeos. Pero el dominio alemán fue totalmente marcado.

A parte de la victoria de los de Münich, otra alegría fue la vuelta al campo del colombiano James Rodríguez, quien disfrutó de varios minutos debido a una lesión de Thiago Alcántara, uno de los goleadores del partido.

A pesar de todos los esfuerzos e incluso el gol que llegó para los turcos, el cual se cataloga como el de “la honra”, el cuadro local no pudo lograr tener una despedida un poco más digna de la Champions League.

Gol temprano

A penas corrían 18 minutos del encuentro cuando el propio Alcántara recibió un pase desde la banda de Thomas Muller y remató a placer, dentro del área chica, para vencer el arco rival rápidamente.

El Besiktas casi ni tuvo opciones en dicha primera parte, de hecho, un remate que terminó en el cuerpo de Hummels fue la única ocasión que tuvieron los turcos, quienes se movían bien hacia adelante pero les faltaba claridad en ese último cuarto de cancha para preocupar al guardameta Ulreich.

En la segunda parte, inmediatamente Rafinha tuvo una subida por la derecha para meter un centro que buscaba algún remate de un compañero, principalmente Robert Lewandowski, pero terminó chocando con Gohktan Gonul y entrando en propia puerta.

El brasileño Vagner Love tuvo el rayo de luz para los turcos con un remate dentro del área tras una pérdida del lateral izquierdo David Alaba en salida. Al final el balón entró con algo de suspense.

Para finalizar, al minuto 54, un centro de Alaba finalizó en el pecho de Sandro Wagner para que, a portería vacía, prácticamente, pudiera anotar el tanto y así sellar el marcador y la clasificación.