El martes 10 de octubre miles de liberianos acudieron a las urnas electorales para elegir al próximo jefe de Estado tras las heridas de una “salvaje” guerra civil que terminó en el año 2003. Veinte candidatos se postularon a la presidencia para preceder a la primera y única mandataria de África y Premio Nobel de la Paz, Ellen Johnson-Sirleaf, pero solo uno logró el tan anhelado puesto.

Al exponer los resultados, el exfutbolista de 51 años, George Weah del partido Congreso para el Cambio Democrático (CCD) y único campeón del Balón de Oro africano en el año 1995, resultó ganador dejando atrás la cancha de fútbol para sentarse en la silla presidencial en un país sumido en una crisis económica y social provocada por la epidemia del ébola en el año 2014.

El considerado como “mejor jugador de la historia del continente”, George Weah, fue electo ante una multitud de liberianos que lo tenían como favorito, derrotando al actual vicepresidente del país, Joseph Boakai.

Un pasado marcado de goles

El primer ganador del Balón de Oro no europeo en llevarse el galardón que otorga la FIFA en trabajo conjunto con la revista France Football, George Weah, quien practicaba cuando niño descalzo con una naranja como pelota, jugó en el AC Milan y en el Paris St Germain (PSG) convirtiendo su sueño en realidad.

Militando en el Chelsea, Manchester City, Olympique, Marsella y en el Al-Jazeera, Weah completó 610 partidos y 279 goles.

En el año 1994/1995, Weah se convirtió en el máximo goleador de la Champions League por marcar 47 goles en 103 partidos con el A.

S. Mónaco, antes de llegar al PSG, donde anotó 55 goles en 138 partidos.

De la pobreza a las comodidades

George Weah nació en Monrovia, Liberia, el 1 de octubre de 1966, en el seno de una familia de ocho hijos. En sus inicios en el fútbol la "pantera de Liberia" jugó en varios clubes africanos hasta que en 1988 fue fichado por el Mónaco, donde jugó cuatro temporadas hasta que en el 94 se fue al PSG.

En 1995 fue traspasado al Milán, en el que ganó dos scudettos. Además consiguió un premio al Futbolista del año en África y recibió el Once de Oro de ese mismo año.

Dos años después de retirarse de las canchas, el actual presidente de Liberia se lanzó a la política con tan solo 39 años de edad, quien luego se hizo Embajador de Buena Voluntad del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef), desempeñando una amplia labor humanitaria en su propio país.

En 2005 se presentó a las elecciones a la presidencia de Liberia y fue derrotado por Ellen Johnson-Sirleaf.​