El Athletic empieza con empate la fase de grupos de la Europa League. El míster del Hertha, Pal Dardai, anunciaba cambios revolucionarios en su once para poner en apuros al Athletic. Los de Ziganda, con Beñat y Núñez en casa, volvían a las rotaciones. Los zurigorri no pasaron del empate a cero, con una excelente actuación de Herrerín.
Una competición ilusionante
La Europa League daba comienzo para el Athletic ante el rival, a priori, más duro del grupo. Los rojiblancos afrontan con mucha ilusión la segunda competición continental, con el objetivo de avanzar paso a paso.
El Hertha de Berlin, rival correoso con jugadores experimentados en Europa, arrancaba el torneo con la intención de ofrecer una buena imagen ante su afición. En las horas previas, su delantero Ibisevic destacaba las ganas con las que asumen el reto de la Europa League.
El Athletic, con dilatada experiencia en este campeonato, rotaba a jugadores importantes como Beñat, que se quedaba en Bilbao, o Raúl García, que arrancaría desde el banquillo. Sorprendente era la decisión de sentar a Markel Susaeta después de no haber jugado contra el Girona en el último partido o no alinear a Enric Saborit para dar descanso a Mikel Balenziaga, tras el serio partido del canterano ante el Eibar hace dos jornadas.
El Hertha, de menos a más
Dardai salía con el once de gala del Hertha de Berlin para recibir al Athletic, en la que es la segunda participación en la fase de grupos en la Europa League para los germanos. El dibujo y la idea del Kuko eran claras: jugones arriba y un centro del campo robusto para contrarrestar la fuerza de los jugadores alemanes.
Pronto empezaría la acción para el Athletic con Aduriz mandando en el ataque. El delantero sacaría un córner tras una jugada individual en el minuto 1. La tranquilidad por confeccionar un juego ordenado mandaba en los rojiblancos, que construían buscando la velocidad de Córdoba y Williams por banda, y el desborde por en medio de Muniaín.
Aduriz intentaba despistar a los centrales, moviéndose y dificultando su marca.
A los 8 minutos de juego, Muniaín probaba con un tiro lejano a Kraft pero este despejaba tras la línea de fondo. El navarro hacia las veces de falso nueve ante la movilidad de Aduriz. Una jugada entre ambos estaría cerca de acabar en las redes en el minuto 16, cuando una dejada de espuela por parte del donostiarra la remataría Iker Muniaín enviándola muy cerca del palo.
El conjunto local se mostraba bien colocado sobre el verde, ordenados y a la espera de su oportunidad para hacer daño a la contra. Con un Athletic dominando el encuentro y el Hertha sin generar peligro, transcurría el partido. Córdoba y Williams intercambiaban bandas cercana la media hora, para desatascar el encuentro buscando mayor profundidad.
La falta de mordiente en ambos equipos caracterizó el primer tiempo: los locales no creaban peligro y los visitantes mediaban buenas triangulaciones pero se topaban con la zaga berlinesa. Pese a ello, el Hertha poco a poco se aproximaba al área de Herrerín. Pecando de inocencia en ataque, los alemanes cerrarían la primera parte intentándolo sin fortuna.
Herrerín, sobresaliente
El conjunto de Dardai salía con ganas de hacerse con el dominio en la segunda parte, metiendo el miedo en el cuerpo de la defensa bilbaína, poco acertada en el arranque. Plattenhardt advertía con un chut desde el costado izquierdo del área, obligando a Herrerín a lucirse. Ibisevic haría lo propio cinco minutos después en un par de ocasiones, topándose con el meta vizcaíno.
El Athletic no daba señas de haber salido del vestuario. Erráticos en el movimiento del esférico, no lograban explotar las individualidades de hombres clave como Muniaín, Williams o Aduriz, poco acertado en sus ocasiones. Córdoba tendría una oportunidad magnífica tras un rechace en el minuto 60, pero golpearía mordido el esférico mandándolo a las nubes.
Los siguientes diez minutos no mejorarían la imagen del partido, avanzando de forma trabada y sin un dominador claro. Ziganda se encomendaría a Raúl García en los últimos veinte de encuentro para aportar mayor agresividad al equipo. Abandonaba el campo el cachorro Córdoba en sustitución del "22".
Iago Herrerín se postulaba para MVP deteniendo un peligroso disparo de Kalou.
Tras esta jugada Dardai daría entrada a Leckie, sentando a Ibisevic. Mientras tanto, el Athletic tiraba de garra apurando hasta el último respiro para conseguir los tres puntos. Vesga cabezeaba en el '82 un centro de San José, pero el remate saldría fuera.
Los técnicos movían los banquillos dando entrada a Susaeta por Williams y a Haraguchi por Kalou, cambios de corte de ofensivo. A falta de 5 minutos, Haraguchi ponía en peligro a Laporte en una carrera individual tras una dejada de cabeza de Leckie. El de Agen se marcaba una carrera espectacular teniendo en cuenta las alturas de encuentro, atajando el tiro de asiático para desviar a córner.
Iker Munían dejaba su puesto a Ager Aketxe para afrontar los 3 minutos de descuento.
El de Romo no pudo ofrecer la magia de su zurda, que tanto ansía ver la afición zurigorri, en las contadas ocasiones que tuvo. Al final, el Athletic logra sacar un punto de un estadio complicado y comienza a pensar en el encuentro liguero ante la UD Las Palmas.