La humillante derrota ante el Real Madrid en la final de la Supercopa de España está dejando muchos señalados en el Barça. Uno de ellos es el el delantero Luis Suárez que no ha estado a la altura en ninguno de los dos encuentros y Leo Messi le ha querido dar un toque de atención.
Muy bajo nivel
Solo dos partidos oficiales ante el máximo rival han dejado al descubierto las muchas carencias del equipo de Ernesto Valverde.
No solo en defensa donde Gerard Piqué, Samuel Umtiti o Aleix Vidal han quedado retratados si no también en ataque.
Con la inesperada salida de Neymar hacia el PSG, Leo Messi sabe que su compañero y amigo Luis Suárez tiene que multiplicarse y hacer un esfuerzo para conseguir todos los títulos, y tanto en pretemporada como en la final ha demostrado que está fuera de forma.
El uruguayo no ha conseguido anotar ningún gol aún, lo que no se puede permitir en un delantero de su categoría y su entrenador le habría reprochado que no se estaba entrenando con suficiente intensidad como para coger la forma adecuada.
Ahora, y tras perder el primer título de la temporada y ante el Real Madrid, Leo Messi se ha unido a esa critica y le habría querido dar un toque de atención a su amigo.
A la espera de refuerzos
Lo que queda claro es que el Barcelona necesita Fichajes. Tanto en mediocampo como en ataque. Fichajes que parece que cada vez son más difíciles por las altas exigencias que ponen los clubs de los futbolistas.
Para el centro del campo ya se ha fichado a Paulinho que acaba de llegar por 40 millones de euros, pero el gran preferido por afición y plantilla es Philippe Coutinho. Las últimas informaciones dicen que el Liverpool habría rechazado una oferta de 125 millones de euros del Barça.
La otra estrella por la que se ha decidido para apuntalar el ataque es Osmele Dembelé, el joven francés ha despuntado en el Borussia de Dortmund y se cree que tiene las condiciones perfectas para ser el sucesor de Neymar.
Pero la salida del equipo alemán también parece imposible. El club está pidiendo más de 100 millones por él, y el Barça no quiere llegar a esas cifras.
Lo único a favor del club azulgrana es que ambos jugadores ya han comunicado a sus clubs el deseo de marcharse y están apartados de sus equipos. Por lo tanto, parece que al final se llegará a una acuerdo para que jueguen en el Camp Nou el próximo año.
Tanto Dembelé como Coutinho serían grandes refuerzos para el Barça, pero ¿conseguirá que sus clubs cedan?