María Escario, periodista, afirma que hay una "voluntad general" por celebrar el 25 aniversario de los Juegos Olímpicos de Barcelona porque "restearon" la vida de "muchas personas", de una "ciudad y, desde luego, del deporte español". Viza subraya que este evento fue una "ilusión colectiva, un derroche de energía, de trabajo brillante, de complicidad". "Hay muchas razones para celebrarlo y muchas maneras de hacerlo", sentencia.

Escario hizo estas declaraciones en el marco de la presentación del libro "Barcelona 92. 25 años del gran cambio en el deporte español" que ha estado elaborado por un equipo de periodistas de la Agencia EFE 25 años después de aquel evento que marcó un antes y un después en el deporte español.

La periodista recuerda que vivió "intensamente" la preparación de estos juegos y en esta coyuntura ella creía que "sabía mucho" pero después de leer libro elaborado por periodistas de la redacción de deportes de la Agencia EFE apunta que ha rebajado del "mucho al bastante" porque se trata de un trabajo "muy serio" que a ella le ha "desvelado" aspectos que desconocía.

En el transcurso del acto, celebrado en el Centre Cultural Blanquerna, el Delegado del Gobierno de Cataluña en Madrid, Ferran Mascarell, recuerda la ceremonia inaugural como un día "muy especial" porque representaba la culminación del "enorme esfuerzo" que se había realizado desde el año 1981 cuando Joan Antoni Samaranch anunció que Barcelona sería la sede de los juegos.

El entonces alcalde de Barcelona, Joan Maragall, según apunta Mascarell, entendió el reto de los juegos como un "gran proyecto en todos los sentidos". En octubre de 1986 se celebró la nominación de Barcelona con la "convicción que estaba sucediendo algo muy importante para la ciudad de Barcelona así como para el deporte español y catalán", señala Mascarell.

El Delegado del Gobierno de Cataluña en Madrid explica que en el ambiente se percibía estaba sucediendo "algo importante".

Propuesta

Mascarell recuerda que en aquellos años ocurrió una "anécdota significativa". Afirma que recibió una llamada de Abad para pedirle una "hipótesis de recorrido de la antorcha olímpica". Así, precisa Mascarell, el primer esbozo de recorrido de la antorcha olímpica "lo hice yo".

"Luego tuve oportunidad de participar en la organización de la olimpiada cultural y participé en el Comité Asesor de la Ceremonia inaugural", señala.

El Delegado del Gobierno de Cataluña en Madrid señala Explica que hubo una "propuesta" por parte de los creativos para que en el "momento culminante" de la ceremonia saliera de una de las esquinas del estadio "un toro de lidia que llegara al centro de estadio donde una paloma de la paz se tenía que situar en uno de sus cuernos y, a partir de ahí, se tenía que crear el clímax inaugural". "Esto no acabó saliendo pero estuvo encima de la mesa", puntualiza.

"Este fue un proyecto extraordinario que todos vivimos con mucha intensidad",indica. A juicio de Mascarrell, la clave del "éxito" de aquellos juegos fue el sentimiento de inclusión por parte de todos los implicados".

Detalla que le correspondía organizarlo al ayuntamiento de Barcelona y contó con la colaboración del gobierno de España, del gobierno de Catalunya pero, en especial, con la colaboración de "casi todo el mundo", es decir, "los técnicos, los ingenieros, los arquitectos, desarrollaron el trabajo como si fuera el trabajo más importante de su vida.También los periodistas hicieron su trabajo dándole el máximo de relieve a lo que estaba sucediendo y los ciudadanos hicieron posible que aquello tuviera el tono que finalmente tuvo".