El uso de antidepresivos está en aumento. Cada año crece su prescripción y empleo, siendo España uno de los países de Europa con mayor demanda. Si bien juegan un papel mayor en Enfermedades como la depresión, también son empleados como parte del tratamiento para patologías como el trastorno obsesivo compulsivo, el trastorno por ansiedad generalizada o el trastorno límite de la personalidad.

El conflicto se encuentra en el momento en el que los antidepresivos son usados como primera opción en el tratamiento psiquiátrico-psicológico y se esté reflejando un posible abuso en su prescripción, siendo usados, incluso, cuando no se cumplen los requerimientos psiquiátricos en atención primaria.

Efectos adversos de los medicamentos

Bien es sabido que cualquier medicamento cuenta con una serie de efectos adversos fácilmente despreciables en cuanto a efectos beneficiosos se refiere.

Dependiendo del antidepresivo, sus efectos secundarios pueden variar, si bien los más comunes son: boca seca, somnolencia, náuseas, problemas de sueño y aumento de peso, especialmente al comienzo del tratamiento.

Sin embargo, los efectos adversos a largo plazo, una vez superado el umbral de 6 meses de tratamiento, son mucho más remarcables que unas sutiles molestias.

Antidepresivos para estados emocionales naturales

Entre los motivos de aumento de depresión no sólo se encuentra una mayor sensibilización de las patologías mentales y emocionales o en el confinamiento que sufrimos la gran mayoría de la población, sino que, al parecer, se estarían patologizando estados emocionales naturales necesarios a nivel adaptativo y esenciales para enfrentar las dificultades que se vayan presentando a lo largo de la vida.

El cerebro reacciona ante los efectos de los antidepresivos

El problema se encuentra en el momento en el que el cerebro suele reaccionar y contrarrestar el efecto de los antidepresivos, lo que puede generar que los psiquiatras o médicos aumenten las dosis en un afán de reducir, de nuevo, los síntomas.

Además, otro de los efectos de que el cerebro reaccione a estos fármacos es la recaída que puede producirse al momento de dejar la medicación, que se ve aumentada en su uso de antidepresivos.

Uno de los aspectos más debatidos en relación a los antidepresivos se encuentra en su asociación con el suicidio, si bien no se ha llegado a ninguna conclusión hasta el momento. De cualquier forma, sí que las muertes asociadas a los antidepresivos tienen relación al efecto de los mismos, debido a su repercusión en numerosos procesos del cuerpo.

Un problema legal

Cabe mencionar que, generalmente, los psiquiatras y médicos no ponen en conocimiento del paciente los riesgos médicos de estos medicamentos, lo que puede tener graves repercusiones legales para estos facultativos.

Así, sería conveniente actuar con mayor cautela en la prescripción de antidepresivos y reconsiderar los motivos para su uso.