Los avances tecnológicos de este siglo son cada vez mayores, gigantescos. El futuro se encuentra cada vez más presente, en los hogares de cada persona, de cada familia y de cada ser humano. Los pasos que da la innovación tecnológica son grandes y rápidos, está constantemente actualizándose, con ello, lo del pasado queda obsoleto o anticuado.

La mayor parte de la tecnología es portátil, se puede llevar a la vista o guardada. Lo mismo pasa con los relojes inteligentes. Samsung, una de las empresas líderes a nivel mundial, no se queda atrás con la innovación tecnológica, lo demuestra con su Samsung Watch Gear S R750, elegancia y tecnología combinadas trabajando de forma conjunta y con un precio de 399 euros.

Apple sacará en 2015 su Apple watch que competirá directamente con Samsung, su precio es desconocido por el momento pero, por experiencia, rondará los 499 euros y dependiendo de sus características o prestaciones inclusive puede duplicar el precio del Samsung Watch Gear. La perfección y la vida útil de los productos de la marca Apple suelen ser muy satisfactorios para el cliente.

Google glass, gafas de realidad aumentada de Google, un buen invento pero su coste deja mucho que desear, 1500 dólares (1204 euros aproximadamente). Este producto prometía mejorar la vida diaria, llegando a tener incluso aplicaciones médicas, pero se está quedando obsoleto por culpa de productos de otras empresas, así como el Apple Watch.

Su lanzamiento se ha retrasado hasta el 2015 y algunas empresas del sector han dejado de trabajar en este producto, como Twitter con sus gadgets para Google glass.

Oculus rift, gafas de realidad virtual, es un producto para el ocio, para vivir una experiencia de juegos en 3D; actualmente hay una versión kit 2 con una resolución de 1080p, su precio de preventa ronda los 350 dólares (aproximadamente 281 euros).

En el 2015, los productos del año anterior quedarán anticuados, se anunciarán versiones mejores y más potentes con precios similares o un poco más superiores. De esto tratan los avances tecnológicos, a pesar de mejorar el ocio o la vida, su objetivo está perseguido por el afán de lucro, avanzar para ganar, lo equivalente a la obtención de un beneficio mayor.