El Pokémon Go es ya un fenómeno de masas, un pasatiempo que ha conseguido enganchar a millones de personas en todo el mundo. Por desgracia, este juego no sólo proporciona horas de diversión y entretenimiento sino que también puede poner en riesgo la integridad física de quienes participan en él.
La primera alarma sobre los riesgos a los que se enfrentan los cazadores Pokémon sonó la semana pasada en Estados Unidos, en el estado de Missouri, donde se produjo el primer incidente: un grupo de avispados delincuentes usaba la aplicación para atraer a los jugadores a un lugar concreto y apartado para robarles a punta de pistola.
Esta fue la más sonada de la avalancha de anécdotas, la mayoría de ellas inocentes y graciosas, que llenaron las páginas de la prensa en los primeros días de la puesta en marcha de Pokémon Go. Nadie podía imaginar que acabaríamos hablando de gente que podría perder la vida a causa de este juego.
Caídas, atropellos y asesinatos
En Encinitas, una pequeña localidad situada cerca de la ciudad californiana de San Diego, dos jóvenes se precipitaron al vacío desde un acantilado mientras trataban de cazar a una de estas criaturas virtuales. La caída, desde una altura de 10 metros, causó heridas de gravedad a ambos. Por otra parte, por todo el país se han registrado ya numerosos casos de atropellos a peatones que han cruzado la calle sin mirar o se han lanzado en medio del tráfico absortos en el juego, con la mirada fija en su smartphone en busca de nuevos Pokémon.
Los casos de invasión de una propiedad privada a la caza del Pokémon que se han registrado hasta hoy son abundantes. Esta es una cuestión peliaguda, especialmente en un país como Estados Unidos, donde los ciudadanos tienen derecho a disparar a los intrusos para defender su propiedad. Precisamente esto ocurrió en Pam Coast (Florida), donde un hombre se lió a tiros con dos adolescentes que merodeaban por el jardín de su casa, al confundirlos con un par de ladrones.
Por suerte no hubo heridos y la cosa quedó sólo en un susto tremendo.
En cambio, un caso similar a las afueras de la ciudad de Chiquimula (Guatemala) tuvo un desenlace mucho peor. Allí, dos adolescentes de 17 y 18 fueron acribillados a balazos desde una camioneta al colarse en una propiedad privada buscando muñecos virtuales con sus teléfonos móviles.
Uno de los jóvenes murió y el otro fue herido de gravedad.
Consejos básicos de seguridad
En España, donde por ahora no se ha producido ningún incidente destacado, la Policía Nacional ha decidido adelantarse y difundir algunos consejos prácticos que permitan a los jugadores convertirse en maestros de Pokémon Go evitando desgracias o situaciones desagradables. Se trata sobre todo de consejos de sentido común, como por ejemplo no utilizar la aplicación al volante o no desatender en entorno urbano (semáforos, pasos de cebra, etc.) mientras caminamos por la calle enfrascados en el juego.
También alerta la policía sobre el peligro que conlleva el uso del GPS de móvil, que permite a los delincuentes saber en todo momento dónde estamos. En definitiva, hay que recorar que sólo nosotros somos responables del uso sensato de esta aplicación y de protegernos del peligro.