TikTok es una red social con una gran variedad de contenido, que va desde personas que realizan diferentes bailes, cuentas que narran sus experiencias personales o divulgan información y otros que entretienen a su audiencia haciendo trucos que, a simple vista, hacen parecer que se trata de magia o que tienen una gran habilidad.

Sin embargo, el tiktoker Khabane Lame se ha dedicado a desmontar estos vídeos que en ocasiones llegan a ser extremadamente absurdos y que hacen ver que los problemas requieren de mucha habilidad e ingenio cuando se pueden resolver fácilmente.

Su cuenta ya tiene más de cuatro millones de seguidores y algunos de sus vídeos superan los 50 millones de reproducciones. Nacido en Senegal en el año 2000, el joven, de 21 años de edad y que vive en Chivasso, localidad de Turín (Italia), ha logrado escalar en el ranking de los usuarios italianos más seguidos de TikTok, llegando en solo 12 meses a alcanzar el millón de seguidores.

Se dedica a desmontar vídeos fake de la red social

La temática de sus vídeos consiste en arruinar los 'hacks' más increíbles de la plataforma y otros que, de plano, parecen poco prácticos o absurdos. Sus tutoriales pueden ir desde coger un vaso con las manos a cerrar una bolsa de pan de molde o ponerse unos calcetines solo con las manos, mostrando alternativas sencillas y usando el sentido común ante los métodos complicados de algunos tiktokers.

Su vídeo más visto tiene casi 200 millones de reproducciones y en él se muestra a una persona cortando un plátano con un cuchillo con mucho cuidado, y luego a Khabane pelando la fruta con las manos, como la mayoría de personas está acostumbrada a hacer. Sin embargo, en sus inicios, el tiktoker hacía otra clase de vídeos, como parodias y voces en off que ya tenían cierta fama.

Su estilo particular lo hace destacar

En sus vídeos, Khabane no dice ninguna palabra, pero solo su lenguaje no verbal, sus expresiones, estilo propio, humor y sarcasmo han bastado para lograr el éxito en sus creaciones, que no se limitan a TikTok, sino que también se pueden ver en sus cuentas de Instagram y Twitter, donde también se encarga de desmontar los 'life hack'.

Y como no dice prácticamente nada, eso le permite llegar a una gran cantidad de usuarios que no comparten el mismo idioma, lo que ha facilitado su fama.

La idea de sus videos surgió como forma de combatir el aburrimiento que le produjo estar todo el día en casa por la cuarentena. Ahora, con su éxito, el joven tiene la intención de ayudar a sus padres, que emigraron a Italia cuando apenas tenía un año. La familia reside en un complejo de viviendas sociales, por lo cual está muy agradecido. De hecho, según sus palabras, la vivienda pública le permitió tener educación y tener vínculos afectivos.