Es cierto que ya existen youtubers profesionales; pero, el dinero que ganan, en la mayoría de los casos, viene por las campañas publicitarias o por las colaboraciones externas que realizan, no por Youtube, directamente.
Además, el porcentaje por publicidad que reciben se ha reducido, variando desde los 20 céntimos de euros hasta los tres euros, por cada mil reproducciones de los vídeos de su canal. Por otro lado, a causa de las duras normas que ha decidido imponer la plataforma, conseguir que nuestro canal sea rentable, es cada vez más complicado.
Muchos jóvenes sopesan la idea de ser youtubers, como posible salida laboral, ya que tienen en mente a youtubers como ElRubius, Willyrex o Dulceida, que son los que más dinero están ganando en España
Pero, ganar dinero a través de la red de vídeos más importantes del mundo, no es nada sencillo. Y, cada vez es peor: cada día hay más usuarios que intentan hacerse un hueco; y, la mayor parte de los ingresos de los youtubers famosos vienen por otros canales, no por sus vídeos.
Se puede ganar dinero a través de Youtube; pero, hacen falta muchas reproducciones
Y, por otro lado, Youtube ha cambiado su política de anuncios: es necesario 10.000 visitas en el canal, para empezar a monetizar. A partir de ahí, la propia plataforma de Google se encarga de ofrecer distintos sistemas de publicidad para que las marcas que estén interesadas, se anuncien en el canal.
Uno de los sistemas más empleados es el del sistema de puja de coste por visualización (CPV): las marcas van a establecer los requisitos del canal para poder poner publicidad y el precio máximo que quieren pagar. El anuncio se paga si el usuario reproduce el anuncio o entra en la página web de la empresa.
Después, tenemos el pago por impresión (CPM): cuando nos sale un anuncio y no podemos saltarlo.
La marca paga a Youtube y este se encarga de pagar su comisión a los Youtubers. El Youtuber acaba recibiendo una pequeña parte del pastel; y, además, el canal debe estar asociada a una cuenta de Google Adsense para poder recibir las retribuciones provenientes de sus vídeos. Por otro lado, la plataforma de Youtube se caracteriza por su rígida política, tanto en contenidos como en publicidad.
El canal que ofrezca violencia explícita o contenidos malsonantes, no va a recibir ingresos por publicidad. La cantidad económica depende del país en el que se visualicen (no es lo mismo que te vean desde Alemania, que desde Argentina). También, si el contenido es en inglés, se paga más que si se graban en español.
Para hacernos una idea, el 90% de las reproducciones no reciben ingresos
Por todo esto, cuando creamos el canal de un Youtube profesional, recuerda que hay mucho tiempo y esfuerzo detrás.