Desde que el fenómeno Pokémon iniciara su auge con su mítica serie de televisión, años atrás, este no ha parado de crecer en diversas partes del mundo. Los videojuegos han contribuido en mucho a ello, especialmente con las aplicaciones y consolas de nueva generación que siguen innovando año con año. Pero incluso esta devoción de los fans ha llegado a preocupar a Nintendo, que más allá de sus exorbitantes ventas o la excelente reputación que le han dado sus últimos productos, teme que algunas personas estén llevando su obsesión demasiado lejos.

Basta con echar un vistazo en Internet para mirar la cantidad de contenidos creados por los fanáticos

Los juegos alternativos son los principales, algunos muy buenos y bastante inventivos como Pokémon Dark Rising, en el que es posible jugar con pokémons de las siete generaciones existentes en 99 niveles.

Pero otros, con una vuelta de tuerca espeluznante que traumatizaría incluso a sus programadores originales. En Pokémon Fusion Generation, por ejemplo, nos toparemos con aterradoras criaturas híbridas, producto de inhumanos experimentos. Y en Snakewood, un curioso hack hecho para Pokémon Rubí, interactuaremos con entrenadores y pokémons zombificados en un universo de pesadilla.

Claro que no todo se deriva hacia el género de terror.

El humor también está bastante presente en la fanaticada, con un toque adulto y bizarro que jamás veríamos en la serie animada. Desde parodias en YouTube hasta memes; ninguno de ellos tiene desperdicio a la hora de burlarse de las situaciones más insospechadas dentro de la saga de Nintendo.

Mención aparte merecen las historias independientes, que al más puro estilo de Tarantino, convierten el mundo Pokémon en argumentos llenos de violencia y situaciones descabelladas.

Pokémon Apokélypse, adaptada a un Live Action, dispone de una trama que mezcla tráfico de pokébolas con peleas ilegales.

Y como guinda de este macabro pastel, tenemos el Pokémon Hentai: imágenes eróticas y aberrantes que suman búsquedas por miles.