Este lunes 12 de febrero en la iglesia de la Virgen de los Dolores de Nogarejas tuvo lugar una misa funeral por David Pérez, uno de los dos guardias civiles asesinados en Barbate el pasado viernes. Aunque la víctima nació en Barcelona, gran parte de su familia era natural de la localidad leonesa. Ahora numerosos agentes de las fuerzas del orden y vecinos del pueblo despidieron al miembro de la Benemérita.

El féretro fue sacado a hombres del tanatorio de Nogarejas

Durante la mañana, el féretro fue sacado a hombros del tanatorio de la localidad de Nogarejas.

Sus compañeros de la Guardia Civil, familiares, allegados y vecinos seguían los restos mortales de David Pérez. El agente tenía dos niños y era miembro del Grupo de Acción Rápida. Actualmente la víctima residía en Sarriguren.

El entierro de David Pérez tuvo lugar en el cementerio del pueblo tras la misa funeral en la iglesia. Durante el último adiós del agente de la Guardia Civil se escucharon gritos de rabia.

Algunas personas afirmaban que los delincuentes siempre ganaban. El incidente en el que perdieron la vida los dos agentes dejó conmocionados a los ciudadanos del país.

El alcalde de Nogarejas dijo que el agente era muy querido

Olivio Campo, alcalde de Nogarejas, dijo que todavía no podían creer lo que había pasado en Barbate.

El regidor municipal comentó que el agente era muy querido en el pueblo. Además, comentó que David Pérez acudía a la localidad cada vez que podía. Previamente, los miembros de la institución armada acudieron a la capilla ardiente de David Pérez en la Comandancia de la Guardia Civil en Pamplona. Durante el acto, la viuda del agente se negó a que el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, le colocara una condecoración al fallecido.

La viuda afirmó que el gesto del ministro del Interior no era lo que hubiera querido el agente de la Benemérita. Varias personas aplaudieron la actitud de la mujer. Posteriormente un miembro de la Guardia Civil le puso la medalla al féretro de David Pérez.

Cabe recordar que el pasado viernes en la noche, los agentes de la Guardia Civil participaban en un operativo contra unas narcolanchas en el puerto de Barbate.

Todo desembocó en una persecución en la que una de las embarcaciones le pasó por encima a la patrullera de la institución armada. Los hechos dejaron un saldo de dos agentes fallecidos: David Pérez y Miguel Ángel González.

Los ocho detenidos han sido puestos a disposición de la autoridad judicial

Sobre las 10:30 de este lunes, los ocho detenidos por la muerte de los dos guardias civiles fueron puestos a disposición del juez instructor del caso. Entre los sospechosos se encuentra seis tripulantes de las narcolanchas y dos hombres que acudieron a recoger en coche al grupo. El hombre que pilotaba la embarcación cuenta con antecedentes por blanqueo de capitales, resistencia a la autoridad y desobediencia.