Los familiares de los detenidos por la muerte de los dos guardias civiles en Barbate respaldaron a los procesados en las puertas de los juzgados. Después de que el juez de instrucción del caso acordara el ingreso en prisión provisional de los seis tripulantes de la narcolancha que embistió a los agentes en el puerto del municipio gaditano el pasado viernes, las familias de los sospechosos comenzaron a vitorearlos: “Inocente, inocente”.

Las familias defendieron a los detenidos

Mientras los agentes de la Guardia Civil trasladaban a los detenidos hasta los furgones, los familiares de los procesados clamaban su inocencia.

Incluso algunos llegaron a pedir a las autoridades que observaran los vídeos que, según ellos, confirmaban la inocencia de los procesados. En ese sentido, afirmaron que las secuencias de imágenes demostraban que los sospechosos no habían estado en ningún momento en el lugar de los hechos. “La jueza no ha querido cogerlos”, soltaron ante los juzgados.

Aunque las pruebas confirmaron que los detenidos sí estuvieron en el puerto de Barbate, ahora sus familiares comentaron que los procesados no habían sido arrestados en una embarcación porque los habían cogido en tierra: "Son inocentes". Las familias añadieron que los sospechosos tenían hijos que iban a la escuela y que la gente les decía que sus padres eran unos asesinos.

A los gritos, los familiares de los tripulantes de la narcolancha afirmaron que no era justicia lo que había pasado en los juzgados. No obstante, los seis hombres ya pasaron su primera noche en prisión tras el fallecimiento de los guardias civiles.

Dos de los ocho detenidos fueron liberados con cargos

En un primer momento, fueron detenidos ocho hombres por su presunta participación en el caso de los guardias civiles.

Sin embargo, dos de ellos fueron liberados con cargos. Ambos fueron a recoger en coche a los tripulantes de la narcolancha cuando fueron arrestados. Cabe destacar que a los hombres de 54 y 34 años les imputaron los delitos de resistencia a la autoridad y encubrimiento. Los dos cuentan con numerosos antecedentes por contrabando y tráfico de estupefacientes.

Los agentes fueron embestidos durante una operación en Barbate

Durante la noche del pasado viernes, varios agentes de la Guardia Civil en una patrullera acudieron al puerto de Barbate, donde se encontraban varias narcolanchas. Ante la presencia de la Benemérita, las embarcaciones intentaron abandonar el lugar y comenzó una persecución mientras algunas personas jaleaban a los delincuentes desde el muelle.

Una de las narcolanchas embistió a la patrullera de la Guardia Civil.

Los agentes Miguel Ángel González y David Pérez perdieron la vida tras el incidente. El primero de ellos tenía una hija y era membro del Grupo Especial de Actividades Subacuáticas.

Por otro lado, David Pérez formaba parte del Grupo de Acción Rápida (GAR). El agente de la Benemérita tenía una mujer y dos hijos. Cabe destacar que la Catedral de Cádiz y la de Pamplona han acogido la misa funeral de los miembros de la Guardia Civil.