Una jueza de Segorbe ha imputado un delito de incendio forestal por imprudencia a cuatro miembros de la brigada municipal de Villanueva de Viver (Comunitat Valenciana). Presuntamente los sospechosos provocaron el fuego mientras limpiaban una senda con máquinas desbrozadoras. Los procesados se acogieron a su derecho a no declarar ante la Benemérita.

El capataz también está acusado del mismo delito

Según ha trascendido, el capataz también está acusado del mismo delito. La Guardia Civil llegó a la conclusión de que el procesado no estaba en el paraje cuando el fuego comenzó en la maleza de un campo abandonado.

Amparo Pérez, exalcaldesa de Villanueva de Viver, también podría ser citada para tomarle declaración en calidad de testigo.

Las pesquisas indican que los cuatro brigadistas incumplieron el protocolo mientras realizaban los trabajos de desbrozo. Los agentes de la Guardia Civil intervinieron el extintor y la mochila pulverizadora de agua que se encontraba vacía. Todo indica que los procesados utilizaron los objetos durante los primeros minutos del incendio.

Por otro lado, el capataz no se encontraba en el lugar cuando comenzó el incendio porque supuestamente estaba realizando otro trabajo. En ese contexto, el hombre tendrá que comparecer ante la autoridad judicial en calidad de investigado por un delito de incendio forestal por imprudencia.

El siniestro estuvo activo 20 días

El incendio forestal se mantuvo activo durante al menos 20 días y afectó a siete municipios en las provincias de Castellón y Teruel. Cabe recordar que el fuego comenzó el 23 de marzo. Al menos 23 aviones y helicópteros se movilizaron para extinguir el fuego. También 500 medios terrestres acudieron al lugar del siniestro durante los primeros días.

El fuego destruyó seis casas y un vehículo

A pesar de las labores de los efectivos de Bomberos, el fuego destruyó seis casas y un vehículo en la aldea La García situada en el municipio de San Agustín. Cabe destacar que los cuatro brigadistas intentaron sofocar el fuego antes de llamar a los servicios de emergencias. Sin embargo, las llamas se propagaron con mucha rapidez.

Según el protocolo establecido para la limpieza de senderos para evitar incendios, el trabajador que utiliza la máquina desbrozadora debe actuar con el apoyo de un operario controlador, el compañero ha de llevar una mochila pulverizadora y un extintor para sofocar las llamas.

Los investigadores creen que los brigadistas no estaban preparados

La Guardia Civil cree que los brigadistas de Villanueva de Viver no estaban preparados porque no llevaban los medios de extinción en el lugar de los hechos. Tampoco los agentes llegaron a la conclusión de que los trabajadores no estaban cerca de las desbrozadoras cuando comenzó el incendio. Por eso, la Benemérita les atribuye un delito contra la seguridad colectiva en su modalidad de incendio forestal.