El cuerpo sin vida del cazador vasco desaparecido fue encontrado este sábado en Cuenca. Otro cazador encontró al hombre que estaba desaparecido desde el pasado domingo 15 de octubre. Cabe recordar que de la víctima se perdió su rastro cuando cazaba junto a un amigo en la zona del coto ‘El Ensanche’. Su compañero fue la persona que dio el aviso a las autoridades.
Las labores de búsquedas habían sido suspendidas dos días
El cadáver fue hallado sobre las 10:00 de la mañana, mientras las labores de búsqueda se retomaban después de dos días suspendidas debido a las lluvias y el fuerte viento en la zona.
Al menos tres horas después, fuentes relacionadas con el caso confirmaron que el cuerpo correspondía a Joxe Pagola.
Concretamente, el cuerpo sin vida del cazador fue encontrado en el paraje El Sabinar, en el término municipal de La Cierva, a unos “10 kilómetros en línea recta” del lugar en el que desapareció el pasado domingo.
El cazador de 67 años y su amigo acudieron a Buenache de la Sierra porque tenían previsto pasar el puente del Pilar hasta el domingo. Joxe Pagola y su compañero estaban alojados en una vivienda en Carboneras de Guadazaón. El fallecido era soltero y no tenía hijos.
La Unidad de Seguridad Ciudadana y Seprona de la Benemérita, un helicóptero y una brigada de incendios forestales participaron en el operativo de búsqueda.
También un hermano y dos sobrinos de Joxe Pagola se unieron como voluntarios al dispositivo en Cuenca.
El dispositivo de búsqueda comenzó el pasado domingo
Tras recibir el aviso del amigo que acompañaba a Joxe Pagola, las autoridades activaron el dispositivo de búsqueda para intentar localizar al desaparecido desde el pasado domingo.
Juan, hermano de la víctima, afirmó que los 130 kilos que pesaba nunca habían sido “un lastre” mientras se desplazaba “por el monte”.
Aunque los familiares de la víctima pensaban que Joxe Pagola no había ido muy lejos porque ahora tenía problemas de movilidad debido a sus rodillas y sus piernas. No obstante, el terreno hacia el paraje de La Cierva era descendiente.
Por eso, el cazador podía haber caminado hasta el lugar en el que fue hallado.
Joxe Pagola iba con la escopeta y dos perros
Cuando desapareció, Joxe Pagola iba con la escopeta y dos perros. Su amigo y la víctima aparcaron el coche a 700 metros del puesto que les correspondía. El donostiarra comenzó a caminar y le dejó su móvil al fallecido para que pudiera iluminarse, aunque este era “antimóviles”.
Ante la tardanza, el amigo se desplazó nuevamente al sendero, pero solo encontró a uno de los perros, había estado acompañando a Joxe Pagola. El cazador tuvo que recibir asistencia psicológica este sábado después que las autoridades confirmaron el hallazgo del cadáver de su compañero. Se ignoran las causas del deceso.
