Una joven de 29 años presuntamente intentó secuestrar a dos niños en el barrio de Las Fuentes de Zaragoza. La sospechosa supuestamente les ofreció a los menores llevarlos a una tienda para comprarles unos caramelos. Sin embargo, la madre de los pequeños se percató de las intenciones de la detenida y evitó el rapto en plena calle. Finalmente, los agentes de la Policía Nacional arrestaron a la presunta autora de los hechos.
La detenida tuvo que ser trasladada a un hospital de Zaragoza
Durante el arresto del pasado martes la sospechosa arremetió contra los agentes de la Policía Nacional y tuvo que ser trasladada al servicio de urgencias del Hospital Provincial de Nuestra Señora de Gracia en la capital de Zaragoza.
Posteriormente, la joven de 29 años ingresó en un calabozo en la comisaria.
Ahora a la joven se le atribuyen el presunto delito de coacciones y un segundo delito de atentado contra los agentes de la Policía Nacional. Según ha trascendido, el incidente se produjo sobre las 18:00 horas del pasado martes 27 de junio. En ese momento, la detenida presuntamente intentó secuestrar a los niños en la calle Doctor Iranzo a pesar de la presencia de la progenitora.
Al parecer la joven no disimuló sus intenciones y la propia madre de los menores de edad se dio cuenta de su maniobra ofreciéndoles caramelos. Acto seguido, la detenida huyó y la progenitora se refugió en una tintorería en la misma calle Doctor Irazo de Zaragoza.
La madre de los niños pidió ayuda a los agentes de la Policía
Desde el interior de la tintorería, la madre de los dos niños pidió ayuda a los agentes de la Policía Nacional. Rápidamente, una dotación de policías se desplazó hasta la calle Doctor Irazo para atender la llamada de la progenitora. Sin embargo, ya algunos testigos de los hechos habían logrado alcanzar a la joven y posteriormente la pusieron a disposición de los agentes.
No obstante, los agentes de la Policía Nacional no esperaban que la detenida se enfrentara a uno de ellos cuando procedían a esposarla. Las investigaciones preliminares apuntan que la detenida habría actuado bajo los efectos de sustancias ilícitas. Incluso la policía ha descartado que la intención de la sospechosa fuera el secuestro de los niños.
El último intento de rapto en Zaragoza se produjo el pasado verano en la localidad de Ricla. En ese incidente, un grupo de personas logró detener durante 15 minutos a una joven de 13 años. Sin embargo, las dos amigas que habían huido se dieron cuenta de que una de ellas se había quedado en el camino y procedieron a buscarla. Finalmente, la víctima se liberó y evitó el secuestro que pretendían llevar a cabo los sospechosos.