Esta mañana en la capital aragonesa, un F-18 se ha estrellado en la base militar durante un vuelo de exhibición. El piloto logró eyectarse antes de la explosión, aunque habría sufrido varios traumatismos. La Guardia Civil confirmó que el siniestro ocurrió sobre las 12.10 horas de este sábado. La aeronave realizaba maniobras cuando ha caído en picado muy cerca de las instalaciones civiles del aeropuerto de la ciudad.

Todavía se desconocen las causas del accidente

Hasta ahora se desconocen las causas del accidente del F-18. Este tipo de aparatos llegaron al país en el año 1986 y se han visto implicados en accidentes graves, dos de ellos con aviones implicados.

El piloto ha sido trasladado en un helicóptero del 112 SOS Aragón al Hospital Militar de Zaragoza. La Delegación del Gobierno remitió al Ministerio de Defensa con el fin de aclarar los detalles del incidente.

El piloto se encontraba realizando un ensayo de las maniobras de exhibición que iban a mostrarse el próximo 10 de mayo. En esa fecha se celebra la jornada de las familias en la base militar de Zaragoza. Las primeras informaciones confirmaron que el piloto había sufrido heridas en los brazos, la cadera y las piernas tras el impacto contra el suelo. Según ha trascendido, el capitán del Ala tendría más de 1.000 horas de vuelo.

El avión cayó en la cabecera de la pista

El F-18 cayó en la cabecera de la pista y los restos del aparato quedaron desperdigados en las inmediaciones de la base militar de Zaragoza.

Los bomberos han logrado controlar el incendio y el avión quedó prácticamente desintegrado. A través de un mensaje en la red social Twitter, el Ejército del Aire y del Espacio confirmó el episodio. En el tuit explicaron que el piloto ya no corría peligro y añadió que el avión cayó en el perímetro de las instalaciones militares de la capital aragonesa.

El primer accidente de un F-18 se produjo en 1988

Este no ha sido el primer accidente de un F-18 en España.

El 7 de noviembre 1988 también en Zaragoza, un avión se estrelló en la sierra de La Muela a pocos kilómetros de la capital aragonesa tras un fallo en los motores. El piloto logró eyectarse y resultó ileso. Unos días después, un aparato y un Hércules 130 colisionaron en pleno vuelo después que intentaron aterrizar y despejar, respectivamente. El accidente no dejó un saldo de fallecidos.

Posteriormente en 1991, un F-18 de la base aérea de Torrejón de Ardoz en Madrid se estrelló en un campo de tiro de Navarra. El piloto del aparato, un teniente del Ejército del Aire, falleció en el lugar de los hechos. El 16 de agosto de 1994, un avión de combate impactó contra un ave mientras participaba en un ejercicio de entretenimiento en un polígono de tiro.

En el año 2000, dos F-18 se estrellaron en pleno vuelo sobre el término municipal de Ejea de los Caballeros. En el incidente falleció un capitán del Ejército del Aire y un teniente logró eyectarse. Ahora el nuevo episodio se suma a la lista de numerosos accidentes con este tipo de aparatos.