Una mujer de 56 años afincada en Ponteareas, Pontevedra, ha fallecido a causa de un cáncer de pulmón. Una tragedia que se ha visto agravada al descubrirse que acudió más de una veintena de ocasiones al médico, donde le dijeron que, en realidad, padecía una lumbalgia y no la enfermedad que le ha llevado a la muerte. Ahora la justicia gallega ha condenado al Servizo Galego de Saúde (Sergas) a indemnizar a la familia de la difunta debido al suceso.

La mujer falleció de cáncer de pulmón tras decirle que era lumbalgia

Según ha podido saberse, solo se supo que había fallecido de cáncer de pulmón tras realizarse la autopsia del cuerpo sin vida.

Durante el análisis forense, los especialistas se percataron de la mujer tenía dicha enfermedad en un estado avanzado. Aun así, hasta ese momento no se supo la enfermedad que padecía una mujer de 56 años en Ponteareas.

De hecho, la fallecida acudió 26 veces a diversos centros de salud a causa de los dolores que le aquejaban. Sin embargo, durante meses, siempre le decían que eran problemas en la espalda a causa de una lumbalgia. Por ello, le recetaban analgésicos para posteriormente mandarla a casa. Una negligencia médica que ha terminado en los tribunales gallegos y que ha desembocado en una condena al Servizo Galego de Saúde (Sergas).

La justicia gallega ha condenado al Sergas a indemnizar a la familia

El Sergas, como ha dictaminado el Tribunal Superior de Galicia, deberá pagar la cantidad de 10.000 euros al viudo de la mujer fallecida, así como 5.000 euros a cada uno de los dos hijos que tenían en común. En total, una suma que asciende a los 20.000 euros de indemnización a la familia, a los cuales habría que añadir intereses derivados de los últimos años.

La justicia ha considerado probado que no se llevaron a cabo todas las pruebas necesarias para un correcto diagnóstico, como hubiera sido un TAC que descartase otras patologías.

A pesar de ir 26 veces al médico, nunca le detectaron el cáncer

Según informan desde Galicia, la mujer de 56 años acudió incluso al Complejo Hospitalario de Vigo entre otros centros sanitarios a causa de los fuertes dolores lumbares que padecía.

Sin embargo, no detectaron en la radiografía de tórax ninguna lesión en el sistema óseo de la paciente. Incluso un traumatólogo la diagnosticó discopatía, con nuevos medicamentos.

Nunca la detectaron el cáncer de pulmón con metástasis que tenía, perdiendo la vida en su casa debido a esta grave enfermedad. La justicia gallega también ha señalado que, debido al estado avanzado del cáncer que sufría la fallecida, la pronta detección de la patología tampoco hubiera garantizado su sanación.