Un cadáver ha sido hallado en un estado avanzado de descomposición en el Baix Empordà, en la provincia de Girona. El cuerpo sin vida corresponde a un hombre, cuya identidad no se ha podido conocer a causa de las deplorables condiciones en las que se han encontrado los restos. Asimismo, estos presentaban claros signos de que el perro del fallecido se estaba alimentando del cadáver. En estos momentos se trata de identificar a quién pertenece el cuerpo sin vida.

El perro del hombre hallado sin vida habría estado devorando los restos de su dueño

Los hechos han tenido lugar el pasado miércoles 22 de marzo.

El cadáver de un hombre era hallado por los propios Mossos d'Esquadra en una caseta abandonada que está situada en el Baix Empordà, en el término municipal de la localidad gerundense de Ullà. Los restos sin vida del individuo no estaban completos, ya que según las primeras informaciones que se conocen, el mismo perro del fallecido habría estado devorando el cuerpo para subsistir. Se trata de un perro de raza Rottweiler que los propios agentes desplazados al lugar también encontraron junto al cadáver de la caseta. Por otro lado, se trabaja con la idea de que podría llevar fallecido entre uno y dos meses.

Al no estar los restos completos, las labores de identificación del cadáver están siendo difíciles

El animal, cuando los Mossos d'Esquadra se presentaron en aquel punto del Baix Empordà, estaba sobre una cama. Asimismo, no reaccionó de forma violenta ni cuando los efectivos policiales estaban realizando su trabajo ni cuando la comitiva judicial acudió al lugar del hallazgo para levantar el cadáver.

En estos momentos se está tratando de identificar quién es el hombre cuyo cuerpo sin vida ha sido descubierto en la mencionada caseta de Ullà. Sin embargo, las labores no están siendo fáciles, a causa del estado de descomposición y de que los restos no están completos al haber sido devorados.

Todo apunta a que puede ser un hombre que llevaba tiempo sin ser visto por los vecinos

No obstante, como apunta el medio local El Punt Avui, las primeras hipótesis apuntan a que los restos sin vida pueden pertenecer a Alfonso Leras, quien llevaría viviendo un tiempo en la caseta abandonada junto a su perro rottweiler. Pero el hombre no llevaría consigo ningún documento que acredite su identidad, así como su cartera o cualquier documento (los habría perdido con la riada provocada por la borrasca "Gloria"). Es así que la autopsia que se practicará a lo que queda de cuerpo se centrará en poder extraer huellas dactilares. Los vecinos de la zona, quienes fueron los que avisaron del suceso a los Mossos d'Esquadra, llevaban semanas sin saber nada de este hombre.