El caso judicial de la desaparición del David Guerrero de 13 años de edad en 1987, conocido como el "niño pintor" ha dado un nuevo giro. La Policía ha comenzado a rastrear a todos los que aparecen en la extensa investigación. Ahora se van a analizar, al menos, 700 identidades, entre ellos familiares, amigos, testigos y hasta videntes. Este es un nuevo paso de la investigación que se efectuará gracias al apoyo de un nuevo equipo de la Policía Judicial de Málaga y que en esta oportunidad utilizará modernas tecnologías.
David Guerrero cumple el próximo 6 de abril 36 años desaparecido
El caso de la desaparición del "niño pintor" en Málaga continúa siendo un gran reto para los investigadores policiales. El próximo mes de abril de cumplen 36 años desde la última vez que fue visto con vida. Los agentes policiales de Málaga hace cuatro años reactivaron las pesquisas y ahora están analizando más de 700 identidades y para ello están investigando a todas las personas que, en alguna oportunidad, tuvieron alguna vinculación con este hecho.
Para dar con el paradero de David, los investigadores policiales están utilizando las técnicas más actuales, todo ello con la finalidad de esclarecer este caso. Para lo cual utilizan el cruce de las bases de datos, además de estudios fisionómicos.
El propósito es conocer realmente lo que le pudo haber ocurrido al "niño pintor".
Los agentes policiales necesitan saber qué le ocurrió a David Guerrero cuando apenas tenía 13 años y se dirigía a la exposición de una de sus pinturas. Es necesario saber si el chico llegó a coger el bus que paraba cerca de su casa o si esa tarde se encontró con alguna persona conocida en su camino.
Definitivamente, algo le ocurrió esa tarde a David. Se presume que algo imprevisto apareció en el camino de quien era un artista promesa en pleno comienzo de su adolescencia. Su madre, Antonia continúa esperando que David aparezca, porque desde el día 6 de abril del año 1987 no lo ha vuelto a ver. Pero Antonia descarta contundentemente que su hijo se haya marchado de casa por su voluntad.
Y está plenamente convencida que se lo llevaron a la fuerza. Desde hace más de 35 años, Antonia mantiene la puerta de su casa abierta, porque espera que su hijo algún día regrese.
Los agentes policiales de Málaga buscan por medio de las nuevas tecnologías alguna información sobre este caso desconocida hasta ahora y que pueda relacionar a alguna persona con la desaparición de David. Para ello la policía han interrogado a un centenar de personas con el propósito de encontrar nueva información que le aporte luz a este suceso.
Se han adelantado varias líneas de investigación para encontrar a David
Juan O’Donnell, inspector jubilado, recordó sobre este caso que se realizaron algunas investigaciones en Lisboa, cuando una persona alertó a los agentes sobre un niño que pintaba cuadros en la calle.
Sin embargo, al comprobar su identidad se verificó que no era David.
La policía de Málaga también investigó la pista de Rudolf Eschmann, un hombre suizo que murió en el año 1990. Trabajaba como fotógrafo y le tomaba fotografías a Niños en las calles. Cuando David desapareció estaba hospedado en el hotel Los Naranjos de la ciudad de Málaga. Una camarera halló en el dormitorio de Rudolf una servilleta que tenía escritos los datos de "niño pintor", como su nombre y apellidos y el barrio donde residía. Pero fue muy difícil realizar indagaciones sobre él, porque la camarera comunicó el hallazgo tres años después de la desaparición.
También se ha investigado a un misterioso hombre llamado Gervasio.
Un testigo anónimo lo calificó como sospecho y estuvo involucrado con la peña cultural llamada ‘El Cenachero’, el lugar donde David acudía a clases de pintura.
En relación a este caso, los investigadores han descartado el tráfico de órganos y el secuestro. Sin embargo, todos estos probables móviles serán revisados nuevamente por los investigadores policiales. La Policía mantiene abierto el caso judicial de la desaparición del "niño pintor".
