Las autoridades españolas están buscando a un grupo conformado entre 30 y 40 niños refugiados ucranianos que huían de la guerra que se desarrolla en su país. Según han informado, los desaparecidos iban acompañados por tres adultos y que habrían sido vistos por última vez en el puerto de Huelva cuando iban a montar en un ferry que los trasladaría hasta las islas Canarias. Sin embargo, deberían haber llegado el pasado viernes y no se sabe nada del paradero de estos.

Más de 30 menores refugiados ucranianos no habrían llegado a Canarias

Según ha informado El País, los Niños refugiados ucranianos tenían que haber embarcado en el ferry el pasado martes y llegar el viernes a las islas Canarias.

El viaje habría sido promovido por una vecina de Fuerteventura de origen ucraniano y sería el segundo periplo que habría organizado, ya que habría conseguido el traslado de 16 menores hasta la localidad de La Oliva provenientes de un orfanato de Kiev. No obstante, en este caso, las autoridades españoles han confirmado que el segundo grupo nunca habría llegado a embarcar. Por este motivo, se está en alerta máximo en Canarias, Madrid y Andalucía, donde se ha iniciado un operativo para saber dónde se encuentran los menores en paradero desconocido.

No se sabe dónde podrían encontrarse el presunto grupo de desaparecidos

Asimismo, en las últimas horas ha existido cierta controversia respecto al caso de esta desaparición.

Si bien la vecina de Fuerteventura habría asegurado a El País que no tiene nada que ver con este segundo traslado, fuentes policiales han confirmado que dicho grupo existiría, aunque de momento no se tienen pistas de dónde puede hallarse. Es así que, según ha señalado la directora general de Protección a la Infancia y la Familia del Gobierno de Canarias al programa radiofónico Hoy por Hoy podrían estar en algún lugar habilitado en la Península para dar cobijo a aquellas personas que han llegado al país huyendo de la guerra de Ucrania.

Las autoridades han alertado del descontrol que puede existir en este tipo de casos

El caso de la presunta desaparición de más de 30 niños refugiados ucranianos, como indica El País, es un ejemplo del descontrol que estaría provocando la acogida de personas que huyen de la guerra de Ucrania sin estar supervisada por las instituciones, más si cabe cuando se trata de menores.

Esta situación, advierten, podrían favorecer actos delictivos como la detención que llevó a cabo la Policía Nacional de un hombre ucraniano en una estación de autobuses de Madrid. En este caso, presuntamente el arrestado se habría hecho pasar como familiar de dos adolescentes, aunque los interrogatorios y las pertenencias que llevaban mostrarían lo contrario. Por ello, continúa la investigación sobre los presuntos menores en paradero desconocido.