Uno de los detalles que tratan de esclarecer los investigadores respecto al asesinato de Samuel Luiz es el móvil. Desde el primer momento siempre ha existido la hipótesis del crimen homófobo, pero a medida que se conocían más datos sobre la paliza mortal esta idea fue quedando relegada. Sin embargo, esta línea de trabajo se ha vuelto a abrir después de que se levantara el secreto de sumario.
Los presuntos implicados en el asesinato de Samuel se reunieron dos veces tras el crimen
Según se ha podido saber, después de producirse la agresión colectiva que acabó con la vida de Samuel Luiz los presuntos asesinos mantuvieron dos reuniones entre ellos.
El primer encuentro se produjo en un parque de A Coruña cercano a donde se había producido la paliza mortal apenas una hora y media después de los hechos; en ella participaban los principales acusados por el asesinato de Samuel y en la conversación hablaron sobre lo ocurrido sin mostrar arrepentimiento sobre el suceso.
La segunda reunión se habría producido días después del crimen de Samuel, donde participaron todos los implicados conocedores del impacto mediático que estaba teniendo el caso. Allí pudieron reunirse ocho personas y acordaron destruir todos los mensajes que habían cruzado sobre los hechos. Asimismo, en este encuentro también habrían pactado guardar silencio si eran interrogados.
Uno de los detenidos volvió a realizar insultos homófobos en la primera reunión mantenida
En cuanto a la primera reunión, la Policía Nacional sabe lo que hablaron los presuntos autores de la paliza que acabó con la vida del joven en A Coruña. Tienen una declaración testifical y, según se ha informado, en ella uno de los ahora detenidos se refirió a Samuel Luiz con el mismo insulto homófobo que se oyó durante la agresión colectiva.
Esto ha sido incluso confirmado por Pedro Agudo, comisario de la investigación.
Es así que vuelve a coger fuerza la investigación sobre si se trata de un crimen homófobo o no. Hay que tener en cuenta que los días posteriores a los hechos, el movimiento LGTBI organizó múltiples protestas y manifestaciones por todo el país denunciando que se había tratado de un asesinato con tintes de odio por la orientación del joven.
Por su parte, los investigadores se encuentran analizando los datos de los teléfonos móviles de presuntos autores del crimen de Samuel en busca de más pruebas y todavía no han confirmado que se trate de un crimen homófobo. No obstante, es una línea que continúa abierta y ahora coge fuerza al saberse que uno de los detenidos volvió a referirse de la misma manera contra la víctima una hora y media después de que se produjera el asesinato.