Se ha conocido En Directo que médicos británicos han extraído más de 50 imanes del estómago de un niño de doce años con total éxito. El niño quería ser magnético y creyó que comiéndose tal cantidad de imanes lo conseguiría. La madre del menor tuvo que acudir a los servicios sanitarios y fue allí dónde le extrajeron los juguetes del interior del estómago.
Morrison, es un niño británico de doce años de edad cuyo deseo por ser "magnético" ha hecho que haya ingerido una gran cantidad de imanes. Rhiley Morrison, está diagnosticado con un trastorno de déficit de atención e hiperactividad.
Además, padece autismo.
Según un medio local, el niño de solo doce años de edad fue operado de emergencia en la ciudad de Mánchester. Según la misma publicación, ya sería la segunda ocasión en la que el niño ingiere imanes. Quería comprobar que si ingería imanes el resto de objetos metálicos podrían adherirse a su abdomen.
Molestias e indisposición después de ingerir gran cantidad de imanes
Tras unos días desde que el menor británico ingiriese los imanes de juguete, comenzó a presentar problemas de salud. Los síntomas que causaron la ingesta de imanes fueron: vómitos, dificultad para comer y para evacuar con facilidad. Tras verse indispuesto, le confesó a su madre que se había tragado las bolas metálicas por accidente."Me quedé boquiabierta, sin palabras, cuando supe la cantidad que se había tragado", comentó la madre del niño, Paige Ward.
Las radiografías detectaban entre 25 y 30 imanes en el estomago del niño
Tras acudir la madre de Rhiley Morrison con su hijo al hospital porque el pequeño se sentía indispuesto y haberle confesado que había ingerido una gran cantidad de imanes, le realizaron varias radiografías. En ellas, podían observarse hasta 30 imanes, pero en la operación posterior se comprobó que el estómago de Morrison tenía un total de 54 imanes.
Tras la intervención, y siempre según las informaciones facilitadas por un medio periodístico británico, Rhiley estuvo hasta diez días sin poder moverse ni ir al baño, además de sufrir vómitos a consecuencia de una fuga intestinal que le impedía hacer vida con normalidad.
Por suerte, el incidente no pasó a mayores. Para concienciar a otros padres, la madre de Rhiley Morrison ha hecho un llamamiento advirtiendo a todos los padres para que eviten en la medida de lo posible comprar este tipo de juguetes a sus hijos, ya que se venden como juguetes pero, si se utilizan de manera inadecuada, pueden desgarrar órganos internos y causar lesiones muy graves, que son incompatibles con la vida. Un hecho que su pequeño ha sufrido por la ingesta masiva de los imanes. Y es que, el deseo por ser "Magnético" hizo que cometiera esta acción.