Varios medios de comunicación se han hecho eco de una noticia que parece de una película cuyo argumento gira alrededor de una guerra de tipo biológico. Un laboratorio situado en Siberia ha sufrido una explosión. Solo sería un accidente laboral, sino fuera por el tipo de material que se guardaba en el mencionado laboratorio el virus del ébola y el virus de la viruela. Tanto la institución que se encarga del laboratorio como las autoridades han asegurado que la población puede estar tranquila, ya que, no hay ningún peligro.

Las autoridades tranquilizando asegurando que no hay ningún riesgo para poblaciones cercanas

La noticia preocupaba, y mucho, a varios medios de comunicación: un laboratorio que se encarga de investigar sustancias peligrosas, ubicado en la población de Koltsovo en Rusia (en la provincia de Novosibirsk, en la aislada Siberia), sufrió este martes 17 de septiembre una grave explosión de gas que desembocó en un incendio y que provocó heridas en un trabajador del mismo.

La explosión ha provocado que salten todas las alarmas, ya que, en el centro de investigaciones, uno de los más importantes del país, se guardaban cepas de virus que se estaban estudiando como es el caso de la viruela o del ébola. Eso sí, el Centro Estatal de Estudios de Biotecnología y Virología ya ha negado a los medios de comunicación que el incendio haya provocado la exposición de los mencionados patógenos a la población.

Hay que recordar que algunos de esos virus son de los más mortales que existen por lo que la explosión podría tener repercusiones muy importantes.

El laboratorio siberiano es unos de los dos centros del mundo donde se guarda el virus de la viruela

Según la versión del mencionado Centro, la explosión tuvo lugar mientras se estaban realizando unas reparaciones en el quinto piso de los laboratorios.

Esta instalaciones son conocidas como el “Vector”. Este laboratorio es uno de los dos centros conocidos por los medios de todo el mundo donde se guardan virus en estado latente de la viruela, por ejemplo.

Con mucha rapidez, tanto el laboratorio como la agencia que se ocupa de su mantenimiento y el ayuntamiento de la localidad se han apresurado a desmentir que haya algún tipo de riesgo biológico tras la explosión.

La razón principal de que no exista riesgo biológico es por no llevarse a cabo trabajos de reparación en el edificio con materiales de tipo biológico en el mismo.

Hay un trabajador herido que sufrió heridas de tercer grado, ya que la explosión fue tan fuerte que se rompieron las ventanas del edificio y el fuego se extendió con gran velocidad a través del sistema de ventilación del laboratorio. Pero, gracias a las medidas de seguridad, solo cubrió una superficie de unos 30 metros cuadrados y pudo ser extinguido sin problemas.