El famoso rescate de los adolescentes atrapados en la cueva en Tailandia, se llevó a su primera víctima. Apakorn Yookongkaew, el comandante de los buceadores hizo el anuncio de la muerte de Samarn Poonan a sus 38 años el día de hoy en transcursos de la mañana. Él era un miembro retirado de la Marina tailandesa. Este lamentable hecho representa un golpe a la esperanza para el rescate de los 12 Niños junto a su entrenador de fútbol, pues la misión resulta ser más complicada de lo esperado.
Golpe a la esperanza de un pronto rescate
Los oficiales de seguridad llevan días evaluando las posibles alternativas para sacarlos sanos y salvos de ese lugar ya que se encuentra inundado por las fuertes tormentas de lluvia.
El buceador en medio de su operativo de rescate perdió el oxígeno, mientras se movilizaba por el laborioso y largo trayecto, al estar debajo del agua desde el inicio hasta el punto donde estaban los niños.
La muerte de un ex submarinista militar, voluntario
El buceador que falleció, era uno de los responsables en repartir oxígeno para los niños durante el recorrido a la salida de regreso. Era un ex submarinista militar que participaba en el recate como voluntario. Tras ir repartiendo las botellas de oxígeno, se quedó sin aire y terminó inconsciente.
Por lo pronto, el rescate se ha retrasado. Y este suceso demuestra lo difícil que es sacar a las 13 personas atrapadas en la cueva por esta vía, ya que hay aproximadamente unos cuatro metros dentro de la gruta.
Por mucho que lograron bajar los niveles de profundidad del agua todavía no es suficiente.
Tiempo que toma bucear los cuatro metros de gruta
Según los expertos se necesitan unas 11 horas para realizar ese recorrido ida y vuelta. De igual manera y a pesar de las dificultades, los menores se mantienen en unas rápidas clases de buceo y natación.
El equipo de rescatistas necesitan actuar rápido, ya que existe la posibilidad de que los niveles de agua aumenten debido a la temporada de lluvia.
Posibles alterativas de escape
Están trabajando en unas tuberías de oxígeno, que pueda renovar el aire en las cámaras donde se encuentran los niños, ya que se ha visto afectado por la cantidad de personas que están en la cueva trabajando en el rescate.
Han evaluado otras opciones una de ellas es esperar unos cuatro meses que es el tiempo que posiblemente tome para que culminen las tormentas de lluvia o por otra parte, realizar un pasadizo taladrando la cueva a través de las rocas.
