"Sacadme de aquí. Hay alguien conmigo".Estos gritos desesperados rompían la oscura noche y provenían de las celdas de aislamiento (son cuatro paredes y un colchón únicamente) del bloque D de la cárcel de Alcatraz, la más conocida del mundo. El vigilante de seguridad del bloque, impasible, no acudió en ayuda ante aquellos gritos. Sin embargo, a las 6 y media de la mañana del día siguiente (hora a la que levantaban a los encarcelados), el carcelero ve el cadáver de un prisionero asesinado brutalmente con unas misteriosas marcas en el cuello dentro de su propia celda de alta seguridad.
Era el sujeto que emitía aquellos gritos ensordecedores durante la madrugada. ¿Quién o qué mató a este hombre dentro de la cárcel más segura de Estados Unidos?
En Alcatraz,una isla azotada por el mar y por el viento, en la bahía de San Francisco (California), se alza la que fue la cárcel de máxima seguridad de Estados Unidos. Con fama de ser un lugar siniestro, la gente la llama la "Isla del Diablo".
En 1401, una leyenda de los nativos americanos contaba que estaba habitada por malignos espíritus. Se convirtió en centro penitenciario en 1934, cuando empezó a ser apodada como "La Roca". Las historias sobre torturas surgieron de inmediato, efectuadas por los carceleros más duros de todo Estados Unidos.
No se permitía el contacto con otros presos y solamente se podían recibir visitas una vez al mes si antes eran aprobadas por el responsable de Alcatraz. Esta situación hizo enloquecer a muchos.
64 hombres murieron dentro de estas rejas o intentando escapar de ellas. Al ver que era prácticamente imposible la escapatoria del lugar, los presos más peligrosos de Estados Unidos se intentaban suicidar con cualquier cosa que tuvieran a su alcance.
Pronto surgieron rumores sobre que la isla de Alcatraz estaba maldita. Algunos miembros de seguridad pensaban que una celda llamada "El agujero" era la residencia del Mal.
En la actualidad, los trabajadores hablan de ruidos extraños o a pisadas como si mucha gente corriera por los pasillos. Hasta han asegurado que han oído a Al Capone tocar el banjo.
Investigadores que han acudido a realizar una experimentación para intentar captar los fenómenos paranormales que allí suceden, dicen que han grabado voces extrañas que piden clemencia.