La vida del pequeño Bruno fue muy difícil, apenas tenía cuatro años cuando los médicos le detectaron una encefalitis autoinmune de causa desconocida. El niño padecía una patología que provocaba que su sistema nervioso central se inflamara y atacara por error a las proteínas de su organismo. El pasado mes de noviembre, el niño murió y sus progenitores decidieron donar los órganos de su hijo.

El pequeño luchó hasta el último minuto de su vida

Bruno luchó desde que los médicos detectaron la patología. Durante la primera etapa de la enfermedad, el niño estuvo seis meses en el Hospital La Paz de Madrid.

Su madre Macarena Fernández afirmó que estuvieron buscando muchos tratamientos en el país y en el extranjero, pero reconoció que finalmente su hijo dijo “basta” tras siete años de mucho “sufrimiento”.

Macarena Fernández comentó que Bruno entendía lo que estaba pasando, aunque no era capaz de expresarse. La madre sostuvo que el niño prácticamente estaba atrapado en su cuerpo. Finalmente los padres tomaron una decisión y el menor falleció a los 12 años el pasado mes de noviembre. Cabe destacar que la probabilidad de padecer la enfermedad es de 5-10 entre 100.000 habitantes al año.

Los padres de Bruno decidieron donar sus órganos

Tanto Macarena como su marido decidieron donar los órganos de su hijo tras su muerte.

Ahora la madre del niño ha hablado sobre la importancia de ayudar a otras personas y familias con motivo del Día Nacional del Donante de Órganos y Tejidos. Visiblemente emocionada la progenitora habló de la donación de los órganos del menor: “Bruno está viviendo seis vidas diferentes”.

La madre de Bruno dijo que la donación de los órganos los había ayudado mucho para gestionar el duelo.

Macarena Fernández ha subrayado que la muerte de su hijo dolía, pero reconoció que la donación los había reconfortado. Incluso llegó a decir que pensaba en la reacción de las familias cuando recibieran la noticia de que había un órgano para su niño. Durante este año, 1.010 donantes han dado una oportunidad a 2.394 personas.

El niño se despidió de sus padres

Asimismo Macarena dijo que Bruno se había despedido de sus padres, un momento de “paz” y muy “dulce” para sus seres queridos. La madre ha comentado que la capacidad de donación movilizó al equipo de trasplantes e hizo posible las seis intervenciones a otros niños, incluso a algunos adultos. Previamente, los progenitores del paciente dijeron que la enfermedad lo había dejado en estado vegetativo y que a partir de ese momento decidieron llevar a cabo “un periplo terrible” para sacar al pequeño de esa situación.

Por eso, Macarena Fernández explicó que sus psicólogos le habían comentado que la donación de los órganos de Bruno fue beneficiosa para afrontar de una manera apropiada el duelo.

La progenitora dijo que era muy “satisfactoria” la sensación de que su hijo estaba viviendo en la retina o en el corazón de otras personas.

Cabe destacar que España es líder en donación de órganos a nivel mundial. La directora de la Organización Nacional de Trasplantes, Beatriz Domínguez-Gil, afirmó que el 84% de las familias del país apoyaba la donación de órganos de su ser querido.