En las últimas horas, el volcán de La Palma ha aumentado su actividad, con más explosiones y más expulsión de lava. Debido a ello se ha desprendido parte del cono principal de este. Por ello, también ha aumentado el caudal de magma que de momento fluye sobre la colada principal de lava hacia el mar. El derrumbe del cono principal del volcán ha provocado inmediatamente un cambio de morfología en la forma de la propia montaña, a la vez que continúan los terremotos que han sido sentidos por la población durante este fin de semana.

El cono principal del volcán de La Palma se desprende y los vulcanólogos vigilan su avance

Tras producirse el derrumbe del cono principal del volcán de Cumbre Vieja se han confirmado los temores que anunciaban los expertos. Además del cambio morfológico, el desprendimiento se ha producido en un sector donde se emitía la lava más líquida y esto ha generado que el magma fluya en mayor cantidad por la colada principal en dirección al mar. Por ello, los vulcanólogos vigilan de cerca a través de drones que sobrevuelan el lugar para ver cómo avanza el nuevo caudal de lava, ya que si se desvía puede afectar a localidades que hasta se habían salvado de la actividad volcánica.

La explosividad del volcán de Cumbre Vieja ha aumentado el fin de semana con varios seísmos

El derrumbe del cono principal del volcán de La Palma ha venido acompañado de una fuerte explosividad. De hecho, durante el pasado fin de semana se ha registrado en la isla un terremoto de 3'6 grados de magnitud entre el medio centenar que ha habido en estos dos días.

Estos últimos seísmos están siendo sentidos por la población palmera y muestran a los científicos que el volcán prosigue en su fase explosiva después de dos semanas de actividad. Mientras, el terreno ganado al mar por la lava ya supera las 27 hectáreas y tiene 50 metros de profundidad.

El Ministerio de Transición Ecológica interviene para dar suministro de agua a algunas zonas

En estos momentos, tras el aumento de lava por el desprendimiento del cono principal, se han incrementado las zonas alcanzadas por los estragos de la erupción de Cumbre Vieja. Se contabilizan más de un millar de edificaciones afectadas, de las que casi 950 han sido totalmente arrasadas por las coladas. En cuanto a las carreteras, ya son más de 30 kilómetros los que han quedado completamente inutilizados.

Sin embargo, lo que más preocupación está generando en las últimas horas es el abastecimiento de agua, ya que la actividad volcánica ha fundido canalizaciones. Es así que el Ministerio de Transición Ecológica ha anunciado que instalará dos desaladoras portátiles y un buque cisterna para garantizar el suministro de agua.