Un operativo llevado a cabo por la Policía Local de Alicante ha terminado con el desalojo y posterior clausura de un restaurante en pleno centro de la ciudad. La intervención policial responde a que el establecimiento contaba con seis empleados contagiados por el COVID-19, entre ellos la cocinera del local. Ahora se enfrentan a sanciones graves por incumplimiento de la normativa sanitaria en plena quinta ola en España.

La Policía Local de Alicante desaloja un restaurante al tener a una cocinera con COVID-19 trabajando

El pasado viernes se produjo la primera intervención de la Policía Local en este restaurante de Alicante.

Esa misma tarde, varios agentes se personaron en el establecimiento, situado en el casco antiguo de la ciudad alicantina. Cuando realizaron la inspección dentro del local se percataron de que la cocinera se encontraba trabajando a pesar de que había dado positivo por COVID-19. Por este motivo, los agentes desplazados hasta el lugar comenzaron urgentemente el desalojo del restaurante, en el que se encontraban 35 personas en total (14 trabajadores y 21 clientes).

Los agentes han clausurado el establecimiento al detectar que seis empleados estaban contagiados

Tras la primera intervención de la Policía Local, al día siguiente volvieron a presentarse en el establecimiento que habían desalojado. Una vez en este notificaron que no solo la cocinera había dado positivo por COVID-19, sino también cinco empleados estaban contagiados y aun así seguían acudiendo a su puesto de trabajado en el local de restauración.

Así se lo comunicaron al responsable del restaurante de Alicante, que se encontraba en el local.

Tanto la cocinera como el responsable se enfrentan a sanciones graves por no cumplir con las medidas

Finalmente este céntrico restaurante de Alicante fue clausurado el pasado domingo. Ahora tanto el encargado del establecimiento como la cocinera, que acudía a trabajar aun a sabiendas de estaba contagiada, se enfrentan a posibles sanciones graves por el incumplimiento de las medidas sanitarias impuestas por la Generalitat Valenciana al poner en riesgo tanto a sus compañeros de trabajo como a los clientes.

La ciudad de Alicante ha registrado otros incumplimientos de las normas sanitarias durante el fin de semana

El desalojo y la posterior clausura del restaurante no ha sido la única intervención de la Policía Local en Alicante durante este fin de semana. Se han interpuesto un total de 73 denuncias por botellones y fiestas tanto en viviendas como en plena calle.

También han sido propuestos para sanción seis locales por permitir el consumo de alcohol en la calle y a otro por encontrarse abierto fuera del horario permitido. Aun así, el operativo ha sido cerrado con un descenso de las denuncias en la ciudad respecto a la semana pasada.