El aumento de casos de coronavirus empieza a preocupar a los epidemiólogos así como a las Comunidades Autónomas, quienes han visto una subida de contagios considerable en sus territorios, registrando en algunos casos máximos históricos en sus cifras de transmisión, como ha sido el caso de Murcia o Extremadura, esta última se encuentra a la cabeza con una incidencia de 1.167 casos por casa 100.000 habitantes. Dada la gravedad que supone el actual aumento de incidencias por la COVID-19 en los hospitales, los encuentros familiares y sociales están en el foco de todas las miradas.

El Gobierno plantea nuevas restricciones para poner fin a estas reuniones para así paliar la subida de contagios de los últimos días.

Las reuniones sociales en el punto de mira por los epidemiólogos

El virus no ha dado tregua, menos cuando se viene de fechas festivas como la Navidad donde la movilidad, los aforos, y los encuentros sociales y familiares han estado muy presentes. Pese a que el Gobierno y los sanitarios advirtieron de que estas reuniones podrían suponer una subida de contagios, hubo un relajo general de las medidas sanitarias y no hubo conciencia de la gravedad. Ya inmersos en la tercera ola de COVID-19, toda medida de restricción es necesaria para parar la subida de la curva.

Según el Sistema Nacional de Salud, los hospitales vuelven a encontrarse cerca del colapso, tal y como sucedió en el principio de la pandemia.

Por este motivo, los sanitarios y epidemiólogos apelan a endurecer el estado de alarma vigente en toda España. Ambos coinciden en señalar las reuniones sociales como las principales culpables de este aumento en la curva de contagios. Opinión a la que se suma Ignacio Aguado, vicepresidente de la Comunidad de Madrid, y la consejería de Sanidad.

Esta última, de hecho, ya ha anunciado que muy pronto anunciará las medidas restrictivas para limitar estas reuniones y frenar una ola que, como aseguran, "se presenta peor que la anterior”.

Medidas 'más drásticas' para frenar las cifras de contagios tras las Navidades

Uno de los datos más preocupantes en los últimos 14 días es la incidencia que se anunció este jueves, 14 de enero: España superaba los 500 contagios por cada 100.000 habitantes cuando el tope de riesgo extremo estaba en rebasar los 250.

Asimismo, Sanidad registraba este martes, 12 de enero, la preocupante cifra de 25.438 contagios y 408 fallecidos en 24 horas. Por ello, los gobiernos consideran necesario endurecer las medidas; entre las que se mencionan: cerrar los negocios que no sean imprescindibles, limitar el ocio o adelantar el toque de queda domiciliario, entre otras restricciones.

Por el momento, Madrid ya ha tomado la iniciativa y ha ordenado el cierre de comercio, ocio y hostelería a las 22 horas así como ha adelantado el toque de queda domiciliario a los ciudadanos a las 23 horas. Asimismo, la comunidad central ha informado que a partir del lunes, 18 de enero, 19 municipios y 47 zonas serán confinados perimetralmente.

Castilla y León también ha determinado en las últimas horas el cierre perimetral de sus nueve provincias.

Urge el confinamiento domiciliario en España, según las autonomías

Los gobiernos regionales de La Rioja, Galicia, Extremadura, Murcia, Extremadura y Andalucía han sido algunos de los que se han sumado en el llamamiento al Gobierno central para que este ordene un confinamiento total y endurezca las medidas de distanciamiento social como pasó en marzo de 2020. También han instado a sus ciudadanos a que no salgan de casa, excepto para lo imprescindible. Por lo menos hasta que las circunstancias se estabilicen y la escalada de contagios baje.