El Instituto Nacional de Toxicología ha debido hacer una advertencia oficial sobre una vieja panacea que promueven grupos de negacionistas del coronavirus. Se trata del dióxido de cloro, o clorito de sodio, que es un compuesto químico que se se usa generalmente como desinfectante o para blanquear productos de papel, pero en los últimos años ha sido aclamado como una cura milagrosa capaz de tratar la mayoría de las Enfermedades y condiciones de salud por los teóricos de la conspiración y los defensores de la medicina alternativa. Su fórmula es ClO2 y consta de un átomo de cloro y dos átomos de oxígeno.
España lleva registradas 26 consultas por intoxicaciones
La también llamada Solución Mineral Milagrosa o SMM desde hace años se promueve peligrosamente para ‘tratar’ diversas y muy dispares enfermedades a las que mucha gente desesperada busca una milagrosa curación: desde el autismo hasta el VIH, pasando por la hepatitis y ahora el Coronavirus. También dicen que ‘oxigena la sangre’. Estos grupos llamados ‘negacionistas’ son comunidades dispares que difunden sistemáticamente teorías conspirativas, algunas verdaderamente increíbles: los terraplanistas que niegan que la Tierra sea redonda, los antivacunas contra la efectividad de la inmunización, los ufólogos afirman la llegada de los marcianos y ahora, en la cresta de la ola, la ‘confabulación del coronavirus’.
Y, como están contra las vacunas, afirman que el dióxido de cloro lo cura.
'Negacionistas' adhieren al consumo del peligroso químico blanqueador
El Servicio de Información Toxicológica (SIT) ha informado que en los últimos meses ha recibido en su conmutador 26 consultas por intoxicaciones por el consumo de esta Solución Mineral Milagrosa o dióxido de cloro en toda España.
El SIT informó que el MMS es un compuesto tóxico que ‘que en modo alguno está indicado para el consumo humano, ni para el tratamiento de ninguna enfermedad no existiendo ningún estudio científico que demuestre las propiedades curativas’. El dióxido de cloro ‘tiene efectos tóxicos y consumirlo afecta distintos órganos’, principalmente el hígado y los riñones, provocando insuficiencia hepática y renal.
Otros síntomas que puede provocar son vómitos, diarrea, hipertensión, náuseas. El pasado 7 de agosto la conductora argentina Viviana Canosa tomó un trago de dióxido de cloro en su programa, desatando un verdadero escándalo que obligó a las autoridades a salir al cruce y explicar que este compuesto químico no cura el coronavirus y que es nocivo para la salud.
Un niño de 5 años murió obligado a tomar dióxido de cloro
No obstante, el 17 de agosto en Argentina murió un niño de cinco años al que sus padres obligaron a tomar dióxido de cloro para combatir del COVID-19. El niño, que no estaba contagiado, falleció de causas multiorgánicas provocadas por la ingesta del químico, tras lo que la conductora fue denunciada penalmente en la justicia del país por su actitud pública irresponsable.
En abril, también el presidente norteamericano Donald Trump fue criticado por sugerir que las 'inyecciones de desinfectantes' podrían ser posibles tratamientos para el coronavirus durante una extraña y divagante rueda de prensa. Las ideas del presidente de Estados Unidos fueron rápidamente calificadas de 'irresponsables y peligrosas', pese a lo cual hubo un aluvión de consultas sobre gente que llegó a tomar tragos de lejía.