Pfizer ha anunciado que ha iniciado la fase de pruebas de su posible vacuna contra el Coronavirus en personas. A pesar de que las empresas farmacéuticas suelen pasar años experimentando con ratones y primates y, después, experimentan con voluntarios. Pero, ante la gravedad de la pandemia que estamos viviendo, se han acelerado todos los tiempos posibles para poder tenerla posible este mismo otoño. En estos momentos, habrá cuatro versiones completamente diferentes de una idéntica vacuna.

Pfizer inició las pruebas con voluntarios en Estados Unidos

La poderosa farmacéutica Pfizer ha iniciado esta misma semana las pruebas de cuatro versiones diferentes de una vacuna en fase experimental contra el COVID-19 en jóvenes en buen estado de salud en Estados Unidos.

Este es un primer paso para poder determinar la inmunogenicidad, la seguridad y el nivel de dosis recomendable para cada clase de paciente en un único estudio de manera continua que está dentro de un programa de desarrollo a nivel global que ya está en vigor en Alemania.

Pfizer ha apostado por un ensayo mucho más sensible

En una fase de prueba completamente inusual por culpa de la necesidad urgente en la que nos encontramos ante la prisa de encontrar una vacuna contra el coronavirus, que ya ha provocado alrededor del mundo la muerte de una cifra superior a los 257.000 fallecidos. En situaciones normales, las empresas deben pasar varios años realizando experimentos con animales y, después, eligen a un único tipo de voluntario para someterlo a las últimas pruebas.

Pero, en el caso de la farmacéutica Pfizer se ha decidido apostar por una ensayo más flexible para poder encontrar lo más rápido posible una solución ante la situación que estamos viviendo.

Esta vacuna, que está creando mano a mano con la compañía germana BioNTech, utilizando una clase de material genético que se denomina ARN para enseñar a nuestro sistema inmunitario a defenderse ante la presencia del virus.

Cada una de las cuatro dosificaciones que han sido desarrolladas representan una combinación completamente diferente del formato del mencionado ARN y un antígeno considerado objetivo. De esta manera, se podrá llevar a cabo una evaluación de los distintos ARNA para poder elegir el que aporta más seguridad y que es, potencialmente, el más eficaz.

Pfizer ha dividido en dos franjas de edad a los voluntarios que forman parte del ensayo

Este estudio está formado por dos fases e incluiría un total de 360 individuos en condiciones de salud buenas que han sido divididos en dos franjas de edad: en la primera, los individuos de entre 18 y 55 años ; y, en el segundo, de 65 a 85 años (la franja con mayor mortalidad por culpa del coronavirus). Los primeros voluntarios que serán inmunizados en esta etapa 1 del estudio serán personas adultas más jóvenes cuyo estado de salud es fuerte. Mientras que estos voluntarios solamente serán inmunizados con la misma dosis que a los candidatos de una primera prueba, cuando estas últimas hayan proporcionado inmunogenicidad y seguridad en una evidencia inicial.

Este ensayo ya ha administrado las primeras cinco dosificaciones en personas el lunes pasado y está siendo supervisada por la Facultad de Medicina de Maryland y por la Facultad de Ciencias Médicas “Grossman” de la Universidad de la ciudad de Nueva York. Se espera que cuatro de cada cinco voluntarios recibirán estas vacunas experimentales, mientras que la persona restante recibirá una dosis de un placebo. De esta manera se estudiaran las distintas posibilidades en esta fase.