Una usuaria bastante activa de la red social Twitter ha mostrado la imagen de una máquina de venta de unos productos muy poco usuales.
La imagen se ha hecho viral por lo que se ven en la mencionada máquina dispensadora, por ser poco habitual en la mayoría de países. Y por ser la primera vez que se veía una parecida en España.
Cuando se quiera rezar, se puede adquirir un santo o una vela en una de estas máquinas expendedoras
La usuaria de la mencionada red social, @ohmyfriend, ha llamado mucho la atención en las redes sociales por compartir la imagen de una máquina expendedora muy poco habitual que descubrió en su pueblo natal, Linares, una localidad que se ubica en la provincia de Jaén.
En la máquina dispensadora se podría adquirir santos. Sin duda, una gran sorpresa para la propia usuaria y sus seguidores. Santos para las urgencias.
La noticia sobre esta máquina de autoventa tan particular saltó a los medios de comunicación locales el pasado mes de junio, cuando un empresario del sector, Rafael Calzado Pérez, tomó la decisión de instalar una en uno de los accesos para los peatones del aparcamiento privada de la Plaza del propio Ayuntamiento de Linares.
No solo se pueden adquirir figuras religiosas del santo o la santa que sea propia de la zona, también velas para encender en la iglesia. Pero lo sorprendente es que todo esto se mezcla con otros productos como son el aceite o varios tipos de mermelada.
No es la primera vez que una noticia deja claro que hay máquinas expendedoras para todos los gustos, aunque la idea generalizada es que son para comprar un sándwich, un refresco o un paquete de patatas fritas, en un momento puntual en el que tenemos hambre. Hoy en día, en una máquina expendedora podemos encontrarnos cualquier cosa que sea lo suficientemente pequeña para poder salir por la bandeja de su parte inferior, así de simple.
Alrededor del mundo hay máquinas expendedoras para todos los gustos y necesidades
En el mercado ya se habían lanzado máquinas expendedoras para disfrutar de una caña de cerveza muy fresquita, la empresa Hawaianas lanzó unas al mercado para poder adquirir alguna de sus famosas chanclas en los aeropuertos, una marca española lanzó una para comprar una botella de vino.
Y tampoco es raro encontrar máquinas de ventas de libros de bolsillo.
En países como China y Japón, por ejemplo, no es extraño encontrar una máquina para comprar cangrejo cocido y preparado directamente para comer. Y la empresa Sephora instaló unas máquinas para la venta de perfumes en los aeropuertos, para evitar oler mal después de un largo viaje. O sea, que hay máquinas para cualquier tipo de necesidades en el mundo.
