Un error en la utlización en los productos de limpieza estaría detrás de una explosión en una piscina de la localidad valenciana de Quart de Poblet, que ha provocado que la piscina haya tenido que ser desalojada para poder prevenir que tuviera lugar una nueva explosión, esta vez, en la sala de mantenimiento. Las primeras investigaciones señalan que la explosión tuvo lugar por culpa de una mezcla, de manera errónea, de los productos químicos que se utilizan en la limpieza de la mencionada piscina.

La explosión ha tenido lugar por una mezcla incorrecta de dos productos durante la limpieza de la piscina

Por el momento, se ha contabilizado una persona herida, de forma leve, por la salpicadura de cloro mientras estaba manejando un bidón cerca de la piscina, según ha comunicado el CICU (Centro de Información y Coordinación de Urgencias de Valencia).

Fuentes cercanas del Consorcio de Bomberos de la Comunidad de Valencia ha informado que la explosión tuvo lugar a las 17,30 horas del domingo por una posible mezcla incorrecta de dos productos: cloro y ácido cinahídrico.

La piscina ha sido desalojada de urgencia por prevención y los bomberos han realizado mediciones para poder comprobar el nivel de cloro en el aire, según el portavoz del Consorcio, que ha indicado que hasta el lugar se habría desplazado el equipo de bomberos de Paterna y un oficial.

También se ha desplazado hasta el lugar una unidad de Soporte Vital Básico para poder tratar al ciudadano herido, que acabó siendo desplazado al Hospital de Manises.

No es la primera vez que hay una reacción química en una piscina por culpa del mal uso de los productos que se emplean a la hora de mantener la calidad del agua de las mismas.

El cloro, que se utiliza para desinfectar, es un producto muy peligroso para la salud y se pide que se deje de emplear a favor de otros productos de limpieza

El cloro, por ejemplo, es el producto que más se suele utilizar para mantener el agua desinfectada. Es un producto químico muy peligroso si no se respetan las recomendaciones por parte de los fabricantes, Incluso, hay varios estudios que recomiendan utilizar ozono en vez de cloro, ya que es capaz de desinfectar sin riesgos químicos, pero es mucho más caro y no es tan fácil de utilizar para la mayoría de las personas.

El cloro es conocido por la gran irritabilidad que provoca en los dientes, en la piel o en los ojos, además de que puede provocar ataques de tos grave y, en casos extremos, un edema pulmonar. Por todo ello, se recomienda no tragar el agua de las piscinas, ducharse después de nadar en la misma y utilizar gafas de buceo para evitar una conjuntivitis.