La víctima de los cinco violadores del grupo de 'La Manada' ha decidido romper su silencio y enviar una carta al programa matinal presentado por Ana Rosa Quintana, donde ha explicado que estos tres años de lucha han sido verdaderamente agotadores.
El mes de junio del año pasado, la víctima de la violación múltiple de 'La Manada' tomó la decisión de hablar, a través de una carta, que había enviado en exclusiva a un redactor de 'El equipo de Ana Rosa'.
Pero, justo un año después, la joven ha decidido volver a enviar una carta al mismo espacio para poder dar su punto de vista sobre sus sentimientos tras hacerse pública la sentencia del Tribunal Supremo, a la que se enfrentaban los acusados, que les ha condenado a quince años de prisión por un delito de violación de forma continuada (en el caso del guardia civil, la pena se ha ampliado dos años más por el robo del teléfono móvil con intimidación).
A primera hora de este mismo viernes, el programa decidía hacer pública la carta donde la joven decidía romper su silencio y explicar cuál es su punto de vista de todo lo que ha sucedido a lo largo de los últimos tres años.
Después de tres años el proceso ha llegado a su fin
Para ella, ha sido un proceso muy largo, demasiado intenso y agotador. Lo peor no fue lo que vivió aquella noche, fue todo lo que tuvo que vivir después. Ahora está luchando por lograr manejar su vida poco a poco, ya que, a lo largo de estos años, ha tenido que abandonar muchas cosas por culpa de la presión y las críticas recibidas.
Ha agradecido todas las muestras de cariño recibidas a lo largo de estos años y se ha mostrado muy agradecida a aquellas personas que decidieron involucrarse desde el primer momento para poder ayudarla.
Desde el juez de instrucción que inició el caso y que nunca dudó en ella, hasta el abogado que se hizo con su caso aquella noche del 7 de julio del 2016, sin olvidarse de todas aquellas personas que formaron parte del caso como fueron los médicos, el fiscal, los agentes de policía, los psicólogos o a la pareja que la encontró aquella noche en plena calle llorando y decidieron ayudarla.
En esos momentos nadie sabía cómo actuar, cómo enfrentarse a lo que había sucedido, pero con ellos fue mucho más sencillo.
Ha dado las gracias a Pamplona y a Navarra
También ha agradecido a la ciudad de Pamplona y a Navarra por todo el empeño que han puesto para que le sea más sencillo volver a visitar esas tierras. No se ha olvidado de dar las gracias a aquellas asociaciones y a aquellas personas que decidieron dar el paso y llevar el caso a la calle, hacerse eco de lo que había sucedido por todos los rincones de España.
Le da las gracias por no haberla dejado sola, en ningún momento.
Ella no se considera ningún tipo de heroína, ya que la fuerza para poder continuar se la ha dado, sin duda, el calor y la fuerza de la personas que se fue encontrando por el camino. Nadie debe olvidarse de la lucha para continuar y se debe seguir con el cambio que desea la sociedad, ya que esto ha consumido la vida de muchas compañeras. Y, un mensaje para todas las mujeres que pasan por algo así: “contadlo, no les dejéis ganar a ellos”.