Ángela Ponce, la joven aspirante a Miss Universo representando a España, pasará a la historia por muchas cosas, entre ellas, por ser la primera aspirante transexual que representa a España en este concurso de belleza.
Haciendo gala de una personalidad tranquila, aceptando las palabras de algunas de sus compañeras en contra de su participación, se muestra impasible mientras sigue recibiendo críticas que, eso sí, no le han impedido situarse entre las favoritas al triunfo final.
Sorprendió por su precioso traje regional
Después del desfile en traje regional, donde lució una “bata de flamenca” de color blanco con claveles rojos, la joven recibió noticias positivas y negativas.
Entre las positivas, fue uno de los trajes más bonitos de la noche. Además, los expertos en moda la calificaron como la mejor en la pasarela.
Más allá de los halagos, Ponce también ha recibido durísimas críticas relacionadas por su aspecto masculino: tiene la espalda muy ancha, no tiene caderas o las piernas son muy finas fueron algunas de las críticas recibidas. Incluso compañeras como Miss Colombia han sido tanjantes a la hora de decir que Ángela Ponce no debería participar en el concurso.
Hay que recordar que Ángela no es la primera transexual en la historia del concurso -ni siquiera la única representante este año-; pero sí la que más críticas está recibiendo, según su entorno muy probablemente por su potencial como candidata al triunfo final.
El uso del color blanco no fue casual
Ángela sólo ha abierto la boca para hablar del espectacular vestido que lució. Una “bata de flamenca” como homenaje a su tierra, Andalucía. El color blanco no fue casualidad "es el color de la paz, el respeto..." que es lo que ella busca, que se logre el respeto a todas las personas, sean del sexo del que sean.
El color rojo de los claveles era un guiño a España y su bandera.
Desde el primer momento Ángela parece haber destacado por su saber estar, por no entrar a las críticas y por su forma de expresarse. Según los expertos en moda, Ángela es una de las mejores desfilando, de las que más ha trabajado conceptos como el saber estar o el protocolo.
El tema de las operaciones estéticas, desde ya hace tiempo, se considera secundario. Hay que recordar que las misses llevan años operando sus rasgos y sus curvas. Pese a la polémica, las opciones de Ponce se mantienen intactas. De hecho hay quien cree que estos ataques le están beneficiando.